Ciudad de México. La orden ejecutiva del presidente estadunidense Joe Biden que restringe el acceso de personas migrantes a su país, aumentará las repatriaciones e incrementará la cantidad de personas migrantes en México, tanto en los albergues como en la calle, estimó Juan Luis Carbajal, director de la Pastoral de Movilidad Humana de la Arquidiócesis Primada de México.
Tras considerar que es una medida motivada por “razones políticas”, pues ocurre a cinco meses de las elecciones en Estados Unidos, el sacerdote scalabriniano, consideró que “si México se ha convertido ya en una sala de espera, ahora con mayor razón sabiendo que hay deportaciones, las personas migrantes van a seguir insistiendo en la aplicación, y quedándose en el país”.
“Este tipo de propuestas vienen en un momento coyuntural, por las elecciones allá en Estados Unidos. Están animadas por razones políticas y por la presión que recibe el gobierno de ese país por parte de los partidos contrarios. Siempre el tema el tema de migrantes es como el árbol de dónde se hace leña; es la moneda de cambio”.
En entrevista con La Jornada, el también director de la Casa del Migrantes Arcángel Rafael, manifestó que “una vez más, porque esto no es nuevo, se toman medidas que van en detrimento de tantas personas que van en camino, y que están esperanzados en llegar a Estados Unidos”.
El religioso comentó que “los estados no están preparados para recibir a tanta gente deportada, entonces se limitan a recibirlos en los aeropuertos y dejarlos tirados en las calles. No hay programas de integración ni de acompañamiento, muchas veces llegan a la ciudad, y ahí los tiran, y se acabó”.
Sostuvo que aunque esta medida va a generar “angustia y preocupación entre los migrantes, ellos no van a dejar de intentar llegar; no van a controlar a la gente, seguirán intentándolo. Son remedios paliativos, que no soluciona de raíz la situación”, y por el contrario se va a provocar que aumenten la cuotas de los coyotes para intentar llegar al norte.
Las personas migrantes, seguramente van a determinar “esperar un poco mas en México hasta que pase el tiempo”, pues esta medida del gobierno estadunidense en momentánea, y “mientras ellos deberán conseguir dinero, y seguirán trabajando en labores informales para luego volver a subir”.
Se quedarán más tiempo en la Ciudad de México y en otras urbes, estimó, “ahora que ando en a Central de Abastos consiguiendo productos para el albergue, hay cientos de ellos aquí trabajando”.