Pekín. China acusó este lunes al Servicio Secreto de Inteligencia de Gran Bretaña (MI6) de reclutar a dos funcionarios chinos, que integran un matrimonio, para trabajar en un “gran caso de espionaje”, cuando ambos países intercambian acusaciones de vigilancia, al tiempo que rechazó impedir la participación de otros países a la cumbre de paz en Ucrania, liderada por Suiza este mes, en respaldo a Rusia, como aseguró un día antes el presidente, Volodymir Zelensky.
El Ministerio de Seguridad del Estado indicó en un comunicado que agentes del MI6 convencieron a un hombre de apellido Wang, quien tenía “funciones centrales confidenciales” dentro de una agencia estatal central, cuando estudiaba en Gran Bretaña bajo un programa de intercambio en 2015.
Los agentes tuvieron “especial cuidado”, invitándolo a cenas y visitas guiadas para “comprender mejor sus intereses y debilidades”, afirmó el ministerio. Al conocer que “tenía un fuerte deseo de dinero”, le solicitaron servicios de consultoría pagados que llegaron a involucrar el trabajo interno de los organismos chinos.
Posteriormente revelaron su identidad a Wang, y le pidieron volver a China a recabar información, y lo convencieron de presionar a su esposa, de apellido Zhou, a hacer lo mismo. “Bajo la fuerte instigación de Wang, ella accedió a recopilar información de inteligencia (...) y ellos se convirtieron en espías británicos”, detalló la agencia.
China y Gran Bretaña han intercambiado durante meses acusaciones de vigilancia. El mes pasado Londres acusó a tres personas de espiar para el servicio de inteligencia de Hong Kong y en abril se presentaron cargos similares contra dos personas acusadas de espiar para Pekín.
“Sin presión” a la cumbre de Ucrania
En otro orden, Mao Ning, vocera de la cancillería, indicó que “la posición de China es abierta y transparente, y bajo ninguna circunstancia estamos presionando a otros países” para evitar su participación en la cumbre de paz en Ucrania, como señaló el domingo Zelensky en foro de Defensa de Shangri-La, en Singapur.
Mientras discutía el papel de China en la resolución de esta guerra, el mandatario ucranio declaró que “Rusia, utilizando la influencia china en la región, también a los diplomáticos chinos, hace todo lo posible para perturbar la cumbre”.
“China espera sinceramente que esta conferencia de paz no se convierta en una plataforma para crear confrontación entre bandos”, aclaró Mao en una rueda de prensa, y precisó que “no participar en el encuentro no significa que no apoyemos la paz” en esta guerra.
Dos días antes, el gobierno estimó que le resultaría "difícil” si Rusia no está invitada.