Ciudad de México. En el preámbulo del proceso electoral, entre enero y abril de 2024 el gasto público escaló 18.1 por ciento anual, su mayor nivel para un periodo similar (pre-comicios), desde que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público tiene un registro comparable.
La dependencia detalló que en esos cuatro meses se erogaron 2 billones 998 mil 710.5 millones de pesos, en parte por el adelanto de transferencias a beneficiarios de programas sociales.
Durante el mismo periodo, los ingresos públicos incrementaron 5.8 por ciento, para alcanzar un total de 2 billones 621 mil 169.6 millones de pesos. Tanto la captación de recursos petroleros, como tributarios incrementó en el periodo, 3.8 y 6.1 por ciento, respectivamente.
Al interior de los ingresos petroleros se muestra que los captados por Petróleos Mexicanos aumentaron 16.9 por ciento; en tanto que los apoyos que el sector central ha dado a la petrolera a fin de que sea saneada –en particular la reducción de la carga por por derecho de utilidad compartida– han hecho caer los ingresos petroleros del gobierno federal, hasta abril, en 31.90 por ciento.
De vuelta al gasto, Hacienda detalló que el gasto programable incrementó 24.2 por ciento. En él se incluye un aumento de 104.1 por ciento en los recursos erogados por el Instituto Nacional Electoral –que tiene a su cargo la realización de las elecciones– y de 67.3 por ciento en los ramos administrativos, los que dependen del Ejecutivo.
Datos de Hacienda muestran que en periodos similares –de enero a abril– de todos los años electorales, el incremento de 18.1 por ciento en el gasto público total es el mayor en tres décadas. En 1994 el avance anual fue de 11.2 por ciento; en 2000 de 14.2 por ciento; en 2006 de 11.4 por ciento; en 2012 de 11.9 por ciento y en 2018, de 9.8 por ciento.
En cuanto a la deuda pública total, ésta aumentó 6 por ciento, para alcanzar 15 mil 420.4 millones de pesos hasta abril de 2024. Se compone en 76.1 por ciento de requerimientos internos y el resto externos.