Ciudad de México. Ante el cierre de las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y la suspensión de sus actividades, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y el Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ONU-DH) expresaron su preocupación porque esta situación afecta a “cientos de personas” que requieren protección como refugiados en México.
En redes sociales subrayó que es fundamental que el organismo cuente con “un espacio que permita la atención segura y digna” de las personas forzadas a huir, que llegan a la Ciudad de México en busca de protección.
“Hay familias, niñas, niños, adolescentes, personas adultas mayores y mujeres embarazadas”, que requieren asilo, puntualizó.
La ONU-DH señaló que ante el aumento de la población en movilidad en la capital del país, las organizaciones trabajan con los gobiernos federal y local para proteger las personas con necesidades de protección internacional, mejorar su recepción, promover la coexistencia pacífica y fomentar comunidades libres de discriminación.
En tanto que mediante un acuerdo en el Diario Oficial de la Federación la Secretaría de Gobernación informó que se considerarán como inhábiles por la Comar los días del 29 al 31 de mayo de 2024.
En los días de suspensión de labores y actividades, “no se computarán plazos y términos procesales que establecen las leyes, reglamentos y demás disposiciones aplicables, correspondientes a los procedimientos administrativos que se substancien” ante la Comisión, señaló en el acuerdo que entró en vigor este miércoles.