Madrid. La investigación interna abierta por el ejército de Israel tras la muerte de un trabajador de la ONU a mediados de mayo en la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, concluyó este jueves que las fuerzas israelíes mataron "por error" al trabajador humanitario.
La pesquisa, que halló indicios de que se produjeron "violaciones de algunas regulaciones" del ejército, reveló que las víctimas del ataque --un ciudadano indio que trabajaba para el Departamento de Seguridad de la ONU y otro jordano, que resultó herido en el incidente-- se encontraban conduciendo en una zona "prohibida" sin haberse coordinado previamente con las Fuerzas Armadas.
Aunque el ejército aseguró que las dos víctimas se encontraban acompañadas por un hombre armado, la pesquisa muestra que el vehículo "fue atacado en varias ocasiones de forma contraria a lo establecido en los protocolos que exigen una cautela extrema en incidentes que estén relacionados con trabajadores humanitarios, incluso si estos están acompañados de hombres armados".
La investigación indica que el vehículo de la ONU se encontraba conduciendo desde las oficinas de la organización hacia el paso de Rafah y estaba claramente identificado con las siglas de Naciones Unidas en su parte superior, si bien carecía de este tipo de identificación por los laterales, según informaciones recogidas por el diario israelí 'Haaretz'.
La muerte del trabajador de la ONU, que fue identificado como Waibhav Anil Kale, supone la primera de un trabajador extranjero de Naciones Unidas en la Franja de Gaza desde que comenzó la ofensiva israelí en la zona. No obstante, por el momento se confirmaron las muertes de tres trabajadores humanitarios que viajaban a bordo de un convoy de la ONG Wold Central Kitchen el pasado 1 de abril.