Ciudad de México. Los grupos parlamentarios de Morena y PT en la Comisión Permanente exigieron la renuncia inmediata de la presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña, por quebrantar la autonomía del Poder Judicial, extorsionar a los magistrados del Tribunal Electoral e intervenir en las elecciones que culminarán el próximo 2 de junio.

Respaldaron un punto de acuerdo con esa demanda, que ayer se presentó ante ese órgano del Congreso.

En conferencia de prensa, el diputado Morenista Hamlet García Almaguer comentó que la ministra Piña violentó el Código de Etica de la Suprema Corte, al organizar una cena en una residencia particular a la que convocó a los integrantes del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), y al presidente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, ya que este tipo de reuniones deben llevarse a cabo en las instalaciones institucionales.

No es el caso, recalcó, del ministro Arturo Zaldívar, quien se separó de la Suprema Corte para hacer apoyar a la candidata la Coalición Sigamos Haciendo Historia, Claudia Sheinbaum, mientras que “Piña desde la presidencia de ese tribunal”, está haciendo campaña a favor de la aspirante presidencial del PRIAN.

Además, agregó, realizó presiones en contra de los magistrados electorales, como se prueba en los mensajes electrónicos de Piña a los magistrados en la madrugada.

Al respecto, el diputado Juan Ramiro Robledo hizo notar que la presidenta de la SCJN no tiene jerarquía ni superioridad sobe el TEPJF , pero los convocó a la cena cuestionada, a la que invitó a “alito” Moreno, uno de los actores políticos de la contienda electoral.

Por su parte, el diputado del PT, Benjamín Robles Montoya, autor del punto de acuerdo, recalcó que Piña debe renunciar de inmediato y el poder judicial tiene requiere reformarse porque se reformado, porque se ha extralimitado y “nosotros en el poder Legislativo somos fieles testigos de eso. Se han entrometido en las decisiones de la mayoría del Congreso mexicano”.

Advirtió que si Piña lo que quiere es sumarse a un movimiento político que, renuncie como lo hizo el ministro Zaldívar, para que así pueda defender los intereses con los simpatiza ya de manera abierta, ya no es lo oscurito”.

Sostuvo que la presidenta de la Suprema Corte “parece más una extorsionadora o una sicaria que una jurista, quizás más que poder judicial con Norma Piña podríamos llamarle el Cártel Judicial”.

Advirtió que “el pueblo de México sigue esperando la explicación de la presidenta de la Suprema Corte sobre esa cena a la que convocó a magistrados electorales y ni más ni menos que también la invitación al presidente del PRI, Alito Moreno, a quien la ministra se ha referido a él como su gran amigo y aliado”.

Actuó “como cabildera” del dirigente priista. Ahí está la independencia del poder judicial, que tanto defiende la oposición, debido a que “se ha convertido en su comparsa y cómplice en contra de un gobierno democráticamente electo”.

“Y todavía tienen el descaro de indignarse por lo que ha venido haciendo Arturo Zaldívar, él sí tuvo la decencia de renunciar a su posición en la Corte para sumarse un proyecto político, sin comprometer la independencia del Poder Judicial”, recalcó.

Robles Montoya sostuvo que la ministra Piña Hernández tiene una fuerte vocación por la amenaza y la intimidación, “primero lo hizo con el senador (Alejandro) Armenta y ahora lo hace con magistrados del Tribunal Electoral”.

El punto de acuerdo fue turnado a comisiones de la Permanente,pero en tribuna la diputada de Morena, Karla Yuritzi Almazán, demandó la renuncia de la ministra por su injerencia en el proceso electoral a favor de Xöchitl Gálvez.

La senadora panista Kenia López Rabadán salió de inmediato en defensa de la presidenta de la Suprema Corte y advirtió que el punto de acuerdo no pasará, porque se requiere de mayoría calificada para discutirlo de urgente resolución. Morena advirtió que no va dejar el tema y esperará a que se dictamine en comisiones.