Madrid. Estados Unidos aplicará la subida de aranceles de 25 a cien por ciento para la importación de vehículos eléctricos de China a partir del próximo 1 de agosto, cuando entrarán en vigor también los incrementos a la compra de baterías, microchips para la industria tecnológica y productos médicos, así lo publicó este miércoles la oficina del Representante Comercial de Estados Unidos.
También aplicará incrementos arancelarios específicos para unas 387 categorías de productos. Estos aranceles está previsto que se empiecen a implementar a lo largo de los próximos dos años y se introducirán de forma gradual.
Estas medidas comerciales punitivas impuestas por Washington contra Pekín incluyen, según el comunicado del gobierno, productos en los que China “pretende tener una posición de control en su cadena de producción o en sectores sobre los que Estados Unidos ha realizado, recientemente, inversiones significativas”.
Además, la Casa Blanca de Joe Biden mantendrá los aranceles establecidos por su predecesor republicano, Donald Trump, aumentará los destinados a la industria del automóvil y duplicará los que se aplican a los semiconductores hasta 50 por ciento.
En concreto, de acuerdo con los datos que ha hecho públicos el Ejecutivo estadunidense, el impacto de estos aranceles en los intercambios comerciales entre las dos economías más grandes del mundo podría alcanzar los 18 mil millones de dólares, afectando a industrias como las del acero, los minerales o las placas fotovoltaicas.
El impacto de las baterías
Una de las categorías de productos que se verán más afectadas por la implementación de los aranceles es la de las baterías de iones de litio, que podría sufrir un impacto de 13 mil 200 millones de dólares en importaciones.
Está previsto que el aumento de los aranceles se empiece a aplicar a partir del 1 de enero de 2026 sobre relaciones comerciales valoradas en más de diez mil 900 millones de dólares.
Excepciones para la industria solar
A pesar de todo, la representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, ha defendido la aplicación de estas medidas propuestas por la Casa Blanca porque, dice, que China “está robando propiedad intelectual estadunidense”.
No obstante, Tai ha recomendado exclusiones arancelarias para la importaciones de ciertas categorías de productos relacionados con la maquinaria industrial en China, incluidos equipos de fabricación de paneles solares.
A este respecto, la oficina de la representante comercial ha puntualizado que se proporcionarán detalles más adelante sobre cómo las empresas podrán solicitar exclusiones a la aplicación de estas medidas, pero avisa de que cualquier exclusión concedida tendrá una fecha desde el 31 de mayo de 2025.
Por su parte, la Comisión Europea dará a conocer la decisión inicial sobre la postura del Ejecutivo comunitario en cuanto a la importación de vehículos eléctricos chinos el próximo 5 de junio.
China estudia subir aranceles a vehículos importados
En respuesta, desde China se ha planteado incrementar sus aranceles a los vehículos importados para contestar a las medidas de los países occidentales. De hecho, Pekín se estaría planteando elevar a 25 por ciento los aranceles a los vehículos importados de gran cilindrada, lo que afectaría a los fabricantes de Estados Unidos y la Unión Europea (UE), según la Cámara de Comercio de China en la UE.
En un comunicado publicado este miércoles, la Cámara de Comercio de China en la Unión Europea asegura “haber sido informada por personas conocedoras del sector” sobre esa posible alza de aranceles y habla de las “implicaciones” que esto tendría para los fabricantes europeos de automóviles.