Ciudad de México. Manuel Ángel Gómez Cruz, coordinador del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias para el Desarrollo Rural Integral (Ciidri) de la UACh, dio a conocer ayer, en el marco del Día Mundial de las Abejas, que en nuestro país aún se usan productos tóxicos que ya están prohibidos en países de la Unión Europea y otras naciones.
Destacó que 29 estados y la Ciudad de México cuentan con leyes que protegen a las abejas, pero faltan sinergias en la política para la gestión de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos que protejan de manera real a esos polinizadores.
Apuntó que de acuerdo con el catálogo de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, las abejas son hipersensibles a la mayoría de los pesticidas, pues alteran el sistema nervioso, causan inmunosupresión y cambios en los ciclos reproductivos de dichos insectos.
Gómez Cruz, experto en problemas económico-agroindustriales nacionales, sostuvo que, por ejemplo, la aplicación del pesticida Benevia implica un alto riesgo para parcelas orgánicas certificadas y en transición.
Afirmó que su uso en huertas aledañas podría contaminar cultivos orgánicos y propiciar que se pierdan certificaciones agrícolas, “además de otras consecuencias, como el grave daño ambiental por intoxicación de polinizadores y un impacto negativo en los ingresos de miles de agroproductores.
Otra de las desventajas de los agrotóxicos es el fenómeno trastorno por colapso de colonias, el cual ha causado la desaparición de colmenas y poblaciones de abejas nativas en varios países.
Expuso que profesores y becarios estudiantes de doctorado de la referida casa de estudios realizaron un informe analítico que busca proteger a la especie Apis mellifera (abeja europea), al igual que a meliponas del norte de Veracruz y noreste de Puebla, retomando casos de éxito, como las experiencias en Colima, Campeche y Yucatán.
El científico apuntó que el movimiento de acción colectiva comenzará con 16 organizaciones orgánicas, asociaciones, centros de investigación del norte de Veracruz y el Ciidri, entre otras instancias para alcanzar una política de alianzas.
En pro del desarrollo del proyecto será fundamental fortalecer la acción colectiva de apicultores, meliponicultores, organizaciones no gubernamentales, municipios, instancias estatales, federales y del Poder Legislativo
, explicó el investigador.