Morelia, Mich. En la última década, más de 70 defensores del territorio y del medio ambiente de los pueblos originarios de Michoacán han sido asesinados o desaparecidos, aseguró el dirigente del Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM), Pavel Guzmán, luego de exigir justicia para el activista y defensor de la mariposa monarca Homero Gómez, ultimado en enero de 2020.
A nivel nacional suman 200, afirmó. Entre los más recientes, mencionó los asesinatos de Jesús Miguel Jerónimo, Jefe de Tenencia de Ichán; Pedro Pascual Cruz, coordinador de la ronda comunal de Ocumicho; Alfredo Cisneros Madrigal, comisariado de bienes comunales de Sicuicho; Antonio Díaz Valencia y Ricardo Arturo Lagunes defensores del pueblo de Aquila.
El dirigente indígena recordó que tan solo en la década de los 80, treinta comuneros de Ostula, municipio de Aquila, fueron asesinados o desaparecidos; lo mismo ocurrió a seis comuneros de Cherán; cinco de Tarejero; cuatro de Santa Fe de la Laguna, 10 en Ichán, entre otros.
Pavel Guzmán sostuvo que, en este contexto de violencia e impunidad, se encuentra también el asesinato del activista y defensor de los bosques y mariposas del ejido El Rosario, municipio de Ocampo, Homero Gómez, es por ello que exigen “a las autoridades correspondientes, justicia verdadera, memoria histórica y esclarecimiento total de su muerte”.
“Las mariposas monarcas forman parte de nuestra cosmovisión; son seres vivos que anuncian las labores de cultivo y el arribo de las ánimas; son viajeros incansables que, si pudieran contar historias, nos relatarían que, en el oriente michoacano, se cometió una injusticia en contra de un hombre que les ayudó a cuidar su hogar y sus vidas y nos pedirían que no lo olvidáramos”, apuntó el coordinador del CSIM.
Pavel Guzmán anunció que la próxima campaña de reforestación, a llevarse a cabo entre junio y julio, llevará el nombre de Tata Homero Gómez, y se plantarán aproximadamente un millón de árboles en los territorios de las 70 comunidades que integran el CSIM.
Comentó que en los últimos 5 años el CSIM ha reforestado socialmente, sin recibir ninguna remuneración alguna, 2 millones de plantas de pino con la ayuda de cientos de comuneras, comuneros y niños de nuestras comunidades.