En ella todo es disfraz, baile de máscaras, caretas por doquier: desde la protección
de un Poder Judicial independiente
hasta el cínico discurso a favor de la democracia y la libertad
; desde un Instituto Nacional Electoral autónomo e imparcial
que emite enérgicos llamados
hasta la defensa
de un país al que abomina, pero lo exprime hasta la última gota para obtener pingües ganancias; desde una marcha ciudadana
con preeminencia de los partidos políticos
comprados por la minoría rapaz, junto con su candidata indígena
, hasta el registro comercial de marcas
y colores con fines político-mercantiles.
Es la derecha autóctona en su desesperado cuan vano intento por recuperar lo que fatuamente considera su negocio, México, privatizado hasta el último rincón por el régimen neoliberal, del que se dice fiel heredera, siempre en defensa de la libertad
… de saquear, exprimir, explotar y masacrar socialmente a los habitantes del país que aborrece.
Bien lo apunta la crónica de La Jornada (Georgina Saldierna, Enrique Méndez y César Arellano): “Sin ningún rubor, las banderas de PAN, PRI y PRD se entremezclaron con la marea rosa, movimiento que evidenció que su candidata ha sido Xóchitl Gálvez, quien en un Zócalo lleno expresó que el 2 de junio no sólo se juega la Presidencia, sino ‘si los siguientes años serán de opresión o libertad’” y, en una suerte de harakiri, llamó a votar para derrotar a la muerte, al miedo y a la mentira
.
Es lo mismo: una y otra vez repite el numerito, cuando si algo caracteriza a la derecha y a los libertarios
–más allá de la corrupción, el saqueo, los negocios sucios, los enjuagues y los moches– es el cinismo, el discurso de odio y la mentira. Está en su ADN. Es fiel reflejo de la fábula de la rana y el alacrán.
Por ejemplo, ayer, en la marea rosa (marca registrada) apareció Santiago ( Tajada) Taboada, cabeza visible del cártel inmobiliario y candidato panista al gobierno de la CDMX, quien sin sonrojarse, pero con abundante sangre en la comisura de los labios, dijo: Veo una ciudad sometida por la extorsión
.
En la zona reservada para las cúpulas de los tres partidos convivieron Alito Moreno, Marko Cortés y Jesús Zambrano (con todo y que Xóchitl, marca registrada, se comprometió
a no tener en su equipo ni rateros, ni pendejos, ni huevones
), todos representantes de la corrupción galopante, la oligofrenia y la holgazanería, quienes aplaudieron como focas. Ellos son el retrato sin retoques
, como diría Édith Piaf.
Todos arropados por el siempre independiente
Poder Judicial, cuya cara más visible es Norma Piña, quien sin decoro alguno en meses recientes se ha reunido con líderes de la oposición, integrantes de organizaciones civiles, académicos, ex funcionarios e intelectuales que tienen como común denominador ser críticos del presidente López Obrador
( La Jornada, Gustavo Castillo).
Algo más: “Piña convocó, en la residencia del ministro Juan Luis González Alcántara, a magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, a Alito Moreno y a Natalia Reyes Heroles Scharrer, secretaria general de la presidencia de la Suprema Corte, y en quien la titular del máximo tribunal ha delegado la operación de más de 17 áreas. González Alcántara se ha convertido en operador y anfitrión de encuentros en los que han participado también otros ministros; Marko Cortés y el ex presidente del INE Lorenzo Córdova … Otro sitio en el cual tienen lugar los encuentros con la ministra Piña es la casa de Federico Reyes Heroles González Garza, padre de Natalia Reyes Heroles Scharrer… Han asistido Max Kaiser, director de anticorrupción (¡¡¡!!!) del Instituto Mexicano para la Competitividad (de Claudito y en el que participa María Amparo Casar); Alejandro Poiré, ex secretario de Gobernación de Calderón; (el multiusos) Héctor Aguilar Camín y el ministro en retiro José Ramón Cossío” (ídem).
De pilón, la Iglesia católica a todo lo que da y en permanente violación de la ley, y el INE tan resultón como la carabina de Ambrosio.
Las rebanadas del pastel
Una vez más, el esperpéntico Javier Milei: con dinero público (500 mil dólares, cuando su frase de batalla es no hay plata
para nada) pagó un viaje privado para reunirse en Madrid con los franquistas de Vox. Armó tremendo conflicto diplomático, esta vez con España, y no precisamente por reclamar el saqueo colonial. El gobierno de Pedro Sánchez llamó a consultas a su embajadora en Buenos Aires con miras a la ruptura de relaciones. Entonces, se ha ganado a pulso un lugar en el Hospital de Emergencias Psiquiátricas.
X: @cafevega