Ciudad de México. El tema de la seguridad, uno de los cuatro que se abordarán hoy en el último debate presidencial, se convirtió desde el primer día de las campañas en el eje de la discusión dentro del proceso electoral, además de ser el que mayor contraste ha generado entre las tres candidaturas.
La abanderada de la coalición Sigamos Haciendo Historia (Morena, PT y PVEM), Claudia Sheinbaum, busca consolidar la estrategia iniciada en el actual sexenio, con una serie de ajustes que incluye fortalecer la Guardia Nacional, privilegiar la coordinación entre distintas instancias, fiscalías y policías estatales, entre ellas, así como la participación del Poder Judicial, el cual, insiste, debe reformarse y no lavarse las manos ante la inseguridad
.
Xóchitl Gálvez, candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN, PRI y PRD), a su vez, ha basado su discurso en constantes críticas a la política federal en la materia, que ha calificado como un fracaso
. Plantea virar a un modelo de policías municipales en todo el país, hasta la creación de grandes cárceles de alta seguridad y enfrentar con la fuerza del Estado a la delincuencia.
Sin ser el elemento central en su agenda, para el candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, la actual es una estrategia fallida
y argumenta que se ha militarizado la seguridad
. Propone la regulación de las drogas y una formación homologada, por medio de una academia de alta formación policial.
Sheinbaum ha advertido que la oposición busca regresar a la política de seguridad del ex presidente Felipe Calderón. “¿A poco queremos que regrese la guerra contra el narco?, ¿a poco queremos que regrese de secretario de Seguridad un (Genaro) García Luna? Mi visión de la seguridad no es mano dura, no es guerra. Es justicia, es que el sistema de justicia en nuestro país funcione y que el sistema de la guardia, de las policías, de la procuración de justicia y el Poder Judicial, operen adecuadamente”. Subraya la necesidad de continuar con la atención a las causas que originan la inseguridad.
Gálvez, quien comenzó su campaña en Fresnillo, Zacatecas, por ser, dijo, el sitio donde la población tiene mayor miedo, lanzó como una de sus principales propuestas crear una gran cárcel que no fuera un hotel para los delincuentes
. Sin embargo, ante las críticas que recibió en redes sociales, el planteamiento quedó fuera de su discurso.
Ahora, insiste en que haya salarios de 20 mil pesos para todos los policías, quitar obras y proyectos a las fuerzas armadas, y al exponer que no dará abrazos a los delincuentes
, asegura que aplicaría la fuerza del Estado cuando sea necesaria
. Por los cuestionamientos que ha recibido, ha aclarado que no será la guerra de Calderón
la que impulse de llegar a la Presidencia, sino un Estado en el que se aplique la ley.