Emanuel Vaquero Navarrete se quedó a las puertas de la gloria. Le faltó precisión y contundencia, incluso algo de técnica, para merecer entrar a la élite de los campeones en cuatro divisiones diferentes. En un combate cerrado, y por momentos muy sucio, perdió por decisión dividida ante el ucranio Denys Berinchyk en la disputa del título ligero de la Organización Mundial de Boxeo, anoche en San Diego, California. Las tarjetas de los jueces fueron 115-113, 112-116 y 116-112.
Navarrete llegó como campeón en tres divisiones distintas, luego de ostentar los cinturones en peso supergallo, pluma y superpluma. Sólo un puñado de mexicanos han logrado ganar campeonatos en cuatro divisiones diferentes en la historia del boxeo. Lo consiguieron Erik Terrible Morales, Juan Manuel Márquez, Jorge Travieso Arce, Leo Santa Cruz y Saúl Canelo Álvarez.
El récord del mexicano Navarrete (ahora 38-2-1) lo colocaba como amplio favorito ante el ucranio que nunca había disputado un campeonato del mundo y jamás había peleado en Estados Unidos.
Navarrete debutaba por tanto en esta categoría, donde tenía que comprobar la pegada y si era capaz de hacer daño, fue claro que no pudo. Berinchyk estaba en su categoría natural.
Desde la primera campanada quedó expuesto el desarrollo dramático de esta historia. Navarrete lució falto de puntería, con golpes que si bien advertían mayor poder que su rival, lo puños pocas veces alcanzaban su objetivo.
Foto tomada de X @Queensberry
Berinchyk bailoteaba como acostumbran los peleadores ucranios. La huella de la escuela de boxeo de las ex repúblicas soviéticas se notaba, esa impronta olímpica de golpes veloces, aunque sin tanta potencia y ese resorteo atlético, de pequeños saltos sobre las puntas de los pies a un ritmo incansable que los convierte en objetivos móviles y difíciles de alcanzar.
Emanuel, en cambio, se aproximaba como un fajador que busca cerrar el espacio del adversario para engancharse en un intercambio donde se juega la honra o la vida. El ucranio amarró gran parte del tiempo a Vaquero, lo abrazó y ensució el combate casi en toda la ruta. Pero el Vaquero no tuvo argumentos para ponerlo revertir lo que tenía enfrente.
“Fui superado en la técnica, no de manera muy amplia, pero Berinchyk es boxeador muy talentoso, un ex olímpico y me puso en evidencia. Vamos a regresar a mas energía”, reconoció Vaquero al final del combate.