Los Ángeles. Con 27 puntos de su joven estrella Anthony Edwards, los Minnesota Timberwolves aplastaron el jueves 115-70 a los Denver Nuggets y empataron esta semifinal de la Conferencia Oeste de la NBA con un global de 3-3.
El séptimo y definitivo juego de esta apasionante eliminatoria se disputará el domingo en la cancha de los Nuggets, los vigentes campeones.
Denver, que había ganado los tres últimos juegos, desperdició su primera oportunidad de clasificación en una noche aciaga en el Target Center, en la que arrojaron la toalla a nueve minutos del final cuando sentaron a sus figuras ante un abismo de más de 30 puntos en el marcador.
El base Jamal Murray, principal escudero del líder Nikola Jokic, fue la cara del naufragio de Denver en Minneapolis quedándose en 10 puntos con una serie de 4-18 en tiros de campo.
La pobre aportación del canadiense, que arrastra problemas de gemelos, y de los suplentes de Denver hicieron inútil los 22 puntos y 9 rebotes de Jokic, que tampoco jugó a su nivel habitual de MVP de la temporada.
Por los Timberwolves casi todo el juego ofensivo pasó por las manos de Edwards, la gran sensación de estos playoffs a sus 22 años.
El escolta All-Star marcó el ritmo de los locales anotando 19 de sus 27 puntos en la primera mitad. Al inicio del tercer cuarto Edwards sufrió una dura caída en una entrada a canasta y, aunque necesitó de atención en el vestuario, se mantuvo en la cancha hasta celebrar el triunfo formando el número siete con sus manos frente al público.
El veterano base Mike Conley volvió con 13 puntos tras perderse el último partido por molestias en el tendón de Aquiles.
El dominicano-estadounidense Karl-Anthony Towns (10 puntos y 13 rebotes) y el francés Rudy Gobert (8 y 14) dominaron las pinturas para unos Timberwolves que no se amedrentaron por el buen inicio de Denver.
Tras verse 2-9 por detrás, Minnesota despegó con un fulminante parcial de 27-2 que asfaltó el camino al triunfo.
Ninguna de las alternativas del técnico Michael Malone funcionó para frenar a Edwards, que castigó a Denver tanto desde la larga distancia (4 triples) como llegando hasta el aro con sus extraordinarias capacidades atléticas.
Los Timberwolves dominaban 57-33 al descanso y, ante el cortocircuito de su rival, siguieron machacando a los vigentes campeones incluso cuando todos los titulares descansaban ya en el banco.
En el último cuarto Minnesota encadenó otro parcial de 24-0 y llegó a ampliar la ventaja a 50 puntos ante el júbilo de una afición que nunca ha celebrado un título y no ve a su equipo en la Final del Oeste desde hace dos décadas.
El ganador del séptimo partido del domingo enfrentará después a los Dallas Mavericks o los Oklahoma City Thunder. En el Este, los Boston Celtics esperan rival de la serie entre los New York Knicks y los Indiana Pacers.