Circula profusamente un libro firmado por Claudia Sheinbaum, de 381 páginas, titulado 100 pasos para la transformación. Puede descargarse en https://twitter.com/Claudiashein/status/1788625197815173520. Se trata de un documento programático que, en tanto documento de campaña, es un texto dinámico que está cambiando, ampliándose, profundizando en sus temas, precisando conceptos, enriqueciéndose con más fuentes bibliográficas y estadísticas. En su dinámica, será la base para la construcción del programa de gobierno, que conoceremos el 1º de octubre de 2024, en la toma de posesión de Claudia, o en una fecha contigua. Es una fuente de conocimiento sobre la candidata y sobre sus propuestas de campaña; y es de gran utilidad para los electores que requieran información programática relevante con miras al próximo gobierno.
El libro inicia con el discurso de Claudia pronunciado el 1º de marzo pasado en la Plaza de la Constitución del Zócalo de la Ciudad de México, cuando dio lectura a 100 compromisos con una formulación sucinta. Encontramos después un informe sobre los “Diálogos por la transformación”, que da cuenta de 222 foros y mesas de trabajo acerca de 14 temas genéricos, organizados por 17 académicos, intelectuales y políticos, coordinados por el doctor Juan Ramón de la Fuente.
Sigue un apartado sobre la visión estratégica, llamada “Proyecto de nación, 2024-2030”, que estuvo a cargo de 21 académicos, periodistas, literatos, intelectuales, internacionalistas. Se revisan los principios humanistas de la 4T a la luz de los nudos que en su tramo final enfrentaron las tres primeras transformaciones, y cómo la 4T busca superar sus propios desafíos políticos, surgidos no sólo de la historia previa, sino surgidos también de la aplicación de las políticas de la 4T y de las respuestas de los intereses en conflicto con el gobierno. La 4T ha enfrentado esos retos buscando crear ciudadanía efectiva en el conjunto de la sociedad, no sólo en las franjas sociales con ventajas, escolarizadas y con recursos. Este apartado teoriza también sobre el carácter de movimiento-partido de Morena, su liderazgo carismático y el papel relevante de las “mañaneras” como vía para pertrechar a la 4T frente a una oposición dueña de la inmensa mayoría de los medios de comunicación.
Otros de los temas notables del documento es la política económica frente al neoliberlismo y la imperiosa necesidad de mantener separados el poder político del poder económico. Destaca en este aparatado el lugar reconocido a las comunidades originarias y el rol asignado al sector externo.
En el tramo mayor del documento se dearrollan los titulados Ejes del Proyecto, formulados con una estructura análoga: diagnóstico (con fuentes bibliográficas y estadísticas), avances logrados por la 4T, objetivos para 2024-2030, y propuestas y acciones de gobierno. Los ejes, que sólo enuncio, son: Economía moral y sistema de pensiones; Desarrollo con bienestar y perspectiva regional; Infraestructura para el desarrollo; Innovación pública; Derechos sociales, bienestar y reducción de la desigualdad; Derecho al trabajo; Derecho a la salud; Derecho de las mujeres; Pueblos indígenas y afromexicanos; Soberanía energetica para el desarrollo sustentable; Desarrollo rural y soberanía alimentaria; Medio ambiente y recursos naturales; Gobierno, paz, seguridad y justicia; Política exterior; Educación, ciencia y cultura; Diversidad y patrimonio cultural, y Fortalecimientro de la democracia y gobierno honesto.
Claudia continúa creciendo y su proyecto político también. Es el proyecto de las nuevas mayorías. Crecerá seguramente sin pausa hasta la formulación institucional del Plan Nacional de Desarrollo. En tanto, continuará ofreciendo respuestas en el clima muy crispado de las campañas políticas. La democracia liberal en la que vivimos resiste la acción de cualesquiera adversarios políticos siempre que no se altere el entramado histórico de relaciones económicas y políticas que mantiene la justicia social en el frigorífico. Es evidente, más aún en época de campañas políticas, que la 4T es el producto, a contracorriente, de ese entramado. Morena no se ha vuelto aún una fuerza dominante tal que haga irresistible la transformación incipiente.
Una parte del cambio legal indispensable se ha realizado, aunque aún faltan múltiples reformas a la Constitución y a las leyes reglamentarias. Adicionalmente, una gran franja social de las víctimas del entramado aludido, es aún base social y grupo ideológicamente dominado de quienes la esquilamaron por toda la historia.
De otro lado, la transformación cabal de los derechos sociales en realidades cotidianas, espera aún en el baúl de los pendientes. Una parte signficativa del cambio ha ocurrido ya: la transfomación de las conciencias en las mayorías. Este segmento social debe crecer en el futuro, como condición ineludible para la continuidad de la 4T. Es preciso proseguir achicando la base social del Prian, hasta que este engendro corrompido muera para siempre.