Madrid. La vocera del Ejecutivo español y ministra de Educación, Pilar Alegría, respondió con contundencia a la propuesta del ex presidente catalán Carles Puigdemont, quien pretende que el Partido Socialista de Cataluña (PSC), vencedor en los comicios autonómicos del pasado domingo, se abstenga para facilitar su investidura. “Hay cuestiones que no cuelan. Que no las compra nadie. Los catalanes han hablado con rotundidad. Los catalanes han hablado este domingo y lo han hecho con la máxima claridad. Han trasladado un mensaje rotundo. Hay un partido que ha ganado. No hay que especular. El gobierno catalán se decide en Cataluña”.
La respuesta del gobierno del socialista Pedro Sánchez supone no sólo rechazar la propuesta de Puigdemont, que tiene siete diputados en el Congreso de los Diputados de Madrid y que gracias a ellos el actual mandatario español logró sacar adelante su investidura, sino también que deja las manos libres al PSC y a su líder, Salvador Illa, para negociar con el resto de formaciones políticas los pactos de gobierno o de investidura.
El reparto de los escaños tras los comicios del pasado domingo es complejo y despierta más incertidumbres que certezas, si bien el candidato socialista, Illa, con 42 diputados, es el único que tiene opciones de sacar adelante una investidura. Ya sea con un acuerdo tripartido con los partidos de izquierda, PSC (42), Esquerra Republicana de Catalunya (ERC, 20) y Comuns Sumar (6), o, en su defecto, con un gobierno en minoría del PSC y Comuns Sumar con la abstención de algunos partidos, como ERC, el Partido Popular (PP) o ambos. Aunque también es bastante difícil.
De ahí que el mensaje de la vocera del Ejecutivo español a la propuesta de Puigdemont fue tan rotundo: “Hay que atender el mensaje de los catalanes pidiendo abrir un nuevo tiempo, una nueva etapa. No nos cabe duda de que va a haber gobierno en Cataluña, de que se va a atender la petición de abrir una nueva etapa y que a esta legislatura le quedan tres años como poco”, afirmó Alegría, ante las preguntas sobre las consecuencias que podrían acarrear a la legislatura española el enfrentamiento con Puigdemont y su partido, que son determinantes para el Ejecutivo de Sánchez para sacar adelante sus iniciativas.
El líder independentista respondió con un mensaje en sus redes sociales, al recordar que “en 2006, Artur Mas ganó las elecciones con seis diputados más de lo que ahora tiene el PSC, pero no gobernó. El año pasado, Collboni (el alcalde de Barcelona) perdió las elecciones en el Ayuntamiento de Barcelona, fue alcalde gracias a un pacto con el PP y tiene un gobierno en minoría. Pedro Sánchez perdió las elecciones españolas pese a venir de presidir cuatro años el Gobierno español, y hoy sigue en el cargo gobernando en minoría”.
Mientras que en el Senado español, con mayoría absoluta del derechista Partido Popular (PP), se rechazó como era de esperar la ley general de amnistía, que ahora volverá al Congreso español para ser votada de nuevo y para su aprobación definitiva, que será aproximadamente a finales de mayo.