Ciudad de México. En vísperas del ‘día clave’ para que los agentes económicos en el mundo pronostiquen el futuro de las tasas de interés en Estados Unidos, y en medio de la guerra comercial entre la principal economía del mundo y China, el mercado cambiario y accionario en México mostraron caídas, despegándose del buen ánimo en Wall Street.
Antes de recibir el dato de inflación de Estados Unidos este miércoles, el peso mexicano mostró cierta presión, pese al debilitamiento del dólar a nivel mundial, al depreciarse 0.19 por ciento con respecto al cierre previo, para cerrar en 16.8436 unidades por dólar spot.
De acuerdo con datos del Banco de México, el tipo de cambio operó entre un máximo de 16.8690 unidades y un mínimo de 16.8320 unidades.
El tipo de cambio en México se mantiene fuerte, pues la moneda nacional ha mostrado volatilidad en las últimas sesiones, pero se mantiene en niveles cercanos al 16.80 por dólar.
Y es que el principal socio comercial de México, Estados Unidos, está teniendo problemas para que su inflación baje más rápido, por lo que mantiene el costo del crédito elevado.
El dólar retrocedió 0.21 por ciento, a 104.880 unidades, según el índice DXY, que mide el comportamiento de la divisa estadunidense frente a seis monedas internacionales, en medio de aranceles más altos a China por parte de Estados Unidos, por lo que la guerra comercial continúa, en minerales, baterías, paneles solares, semiconductores, entre otros.
En la sesión de este martes se conoció que la inflación al productor en Estados Unidos repuntó hasta 0.5 por ciento durante abril, mostrando un avance desde 0.2 por ciento anterior y superior a las proyecciones de 0.3 por ciento, con lo que se fortaleció la idea de que un primer ajuste de la Reserva Federal podría tardar más de lo esperado. No obstante, las lecturas del mes pasado se revisaron a la baja, lo que ayudó a compensar algunos de los aumentos recientes.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) terminó la sesión con una caída de 0.87 por ciento, a los 57 mil 231.74 puntos.
De acuerdo con analistas económicos, si se cumplen las previsiones de inflación estadunidense, de 3.4 por ciento esperado para abril, afianzará las expectativas de un retraso en el inicio de las bajas de tasas de interés por parte de la Fed, pues sigue muy alejada de la meta de 2 por ciento.
La brecha en términos de inflación permite afianzar el diferencial en términos de intereses de la deuda. La rentabilidad exigida al bono estadunidense a 10 años aguarda la publicación de las cifras de IPC moderando un poco del entorno del 4.50 por ciento, en 4.446 por ciento.
En tanto, el S&P 500 y el Dow Jones subieron 0.48 y 0.32 por ciento, respectivamente. El Nasdaq, de gran tecnología, subió 0.75 por ciento, para alcanzar un nuevo cierre récord de 16.511.18 puntos, su primer récord desde el 11 de abril.
Después de que los datos de Estados Unidos avivaron la preocupación de que las tasas de interés pudieran mantenerse altas, pero los riesgos potenciales para el suministro derivados de las tensiones en Medio Oriente y los incendios forestales en Canadá pusieron un piso al mercado del petróleo.
Los futuros del crudo Brent cayeron 1.18 por ciento, a 82.38 dólares el barril; mientras que los futuros del crudo estadunidense West Texas Intermediate (WTI) perdieron 1.39 por ciento, a 78.02 dólares el barril.