El Cairo. Tras una noche de intensos bombardeos aéreos y terrestres, Israel envió ayer tanques al este de Jabaliya, en el norte de la franja de Gaza, al tiempo que la artillería y aviones israelíes golpearon el campo y la zona de Zeitoun, al este de la ciudad de Gaza, donde las tropas combaten con milicianos palestinos desde hace una semana.

En tanto, Egipto anunció que se unirá a Sudáfrica en su demanda por actos de genocidio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para que imponga nuevas medidas a Israel, debido a la magnitud de los ataques israelíes contra civiles palestinos.

Las incursiones israelíes en el enclave palestino incluyen ataques deliberados contra civiles, destrucción de infraestructuras, desplazamientos forzados y la creación de condiciones de vida insoportables, lo que lleva a una crisis humanitaria sin precedente, y constituyen una violación flagrante del derecho internacional y el Cuarto Convenio de Ginebra de 1949 sobre la protección de los civiles en tiempos de guerra, indicó la cancillería de la nación norafricana.

En este contexto, el ejército israelí afirmó que las fuerzas que operan en Jabaliya buscan impedir que Hamas, que gobierna en Gaza, restablezca ahí sus capacidades militares.

Estamos operando en la zona para eliminar esos intentos, declaró Daniel Hagari, vocero militar israelí, durante una reunión con periodistas.

Hagari añadió que las fuerzas israelíes mataron a unos 30 militantes palestinos en el distrito de Zeitoun.

Fue una noche muy difícil, comentó a la agencia informativa Ap Abdel Kareem Radwan, palestino de 48 años habitante de Jabaliya.

Las Brigadas Ezzeldin Qassam, brazo armado de Hamas, aseguraron que bombardearon con ayuda de drones dos de los carros de combate Merkava utilizados en la incursión israelí.

“Las brigadas han atacado dos tanques sionistas con dos proyectiles Al Yasin 105 detrás de la mezquita de Riyad Salehin, al este del campo de refugiados de Jabaliya, en el norte de la franja de Gaza”, indicó el grupo en un comunicado en Telegram.

El número de muertos en la operación militar de Israel en Gaza superó 35 mil y el de heridos llegó a 78 mil 755 desde que empezó el conflicto bélico el pasado 7 de octubre, informó el ministerio gazatí de Salud.

El secretario estadunidense de Estado, Antony Blinken, hizo ayer algunas de las críticas más fuertes hasta el momento de la administración de Joe Biden sobre la conducta de Israel en la guerra en Gaza, al afirmar que las tácticas israelíes significan una horrible pérdida de vidas de civiles inocentes, pero no lograron neutralizar a los líderes y combatientes de Hamas y podría generar una insurgencia duradera.

En un par de entrevistas televisivas, Blinken añadió que a medida de que Israel se adentra en Rafah, en el sur de Gaza, una operación militar puede tener cierto éxito inicial, pero corre el riesgo de dañar terriblemente a la población sin resolver un problema que ambos queremos solucionar, que es garantizar que Hamas no pueda volver a gobernar el enclave palestino.

Llamado de la ONU a un alto el fuego

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, pidió ayer un alto el fuego inmediato en la franja de Gaza.

Un alto el fuego sólo será el comienzo. Será un largo camino para recuperarse de la devastación y el trauma de esta guerra, señaló Guterres.

A propósito de la novena Conferencia para fomentar asociaciones eficaces para una mejor ayuda, con sede en Kuwait, el alto diplomático pidió ampliar el respaldo para el desarrollo a largo plazo de la franja, así como la recuperación y reconstrucción de vidas.

En medio de la oscuridad, el compromiso de la comunidad humanitaria de ayudar y apoyar a las personas es un rayo de luz, aseguró el titular de la ONU.

Al acto, asistieron donantes que se comprometieron a destinar más de 2 mil millones de dólares en los próximos dos años para las operaciones humanitarias en Gaza.