Londres. El Banco de Inglaterra mantuvo su tasa de interés clave en 5.25 por ciento, su máximo nivel en 16 años, aunque ofreció un indicio de que una reducción podría estar en juego a partir de junio, ya que se pronostica que la inflación se ubicará por debajo de la meta.
En un comunicado el jueves, la Comisión de Política Monetaria de nueve miembros del banco votó 7-2 a favor de mantener las tasas sin cambios, y los dos disidentes respaldaron una reducción de un cuarto de punto. La última vez, sólo un integrante votó a favor de un recorte de un cuarto de punto.
Al igual que la Reserva Federal de Estados Unidos la semana pasada –que mantuvo sin modificación las tasas–, la mayoría del panel quiere ver más evidencia de que la inflación está bajo control.
El aumento en el número de quienes respaldan una reducción de tasas en el Reino Unido es una clara indicación de que hay un equilibrio cambiante en la comisión a favor de los recortes.
La inflación general en el Reino Unido ha bajado a una tasa anual de 3.2 por ciento, su nivel más bajo en dos años y medio, pero sigue siendo superior al objetivo de 2 por ciento del banco.
“Hemos recibido noticias alentadoras sobre la inflación y creemos que se acercará a nuestro objetivo de 2 por ciento en los próximos meses”, dijo el gobernador del Banco, Andrew Bailey. “Necesitamos ver más evidencia de que la inflación se mantendrá baja antes de que podamos reducir las tasas de interés. Soy optimista y creo que las cosas van en la dirección correcta”.
Bailey indicó que los mercados financieros son más pesimistas sobre la trayectoria de las tasas de interés y que “es probable que necesitemos recortar las tasas bancarias en los próximos trimestres, posiblemente más de lo que actualmente están descontados los mercados”.
Sin embargo, dijo que “no se descarta” un recorte en la próxima reunión de junio, si bien insistió en que “no se trata de un hecho consumado”.