Ciudad de México. Carlos Valdés investigador titular del Departamento de Sismología del Instituto de Geofísica de la UNAM, señaló, que en México han ocurrido 190 sismos importantes mayores de 6.5 grados desde 1900.
Durante los periodos de gobierno de los 26 presidentes que ha tenido nuestro país en todos han ocurrido sismos mayores a una magnitud de 6.5., indicó durante el primer Encuentro Internacional de Periodismo en Gestión Integral de Riesgos de Desastres que se realiza en el Instituto de Geofísica de la máxima casa de estudios.
Sólo durante el periodo de Pedro Lascurain Paredes, no ocurrió ninguno porque su presidencia duró tan sólo 45 minutos, un tiempo muy corto como para que hubiera ocurrido un sismo.
Durante el actual periodo de gobierno “hemos llevado un sismo cada año con estas características: 6.5 en el 2019; 7.4 en el 2020; 7.1 en 2021; 7.7 en 2022; 6.5 en 2023”.
Con tan sólo nombrar estos datos, “la pregunta sería, bueno esperaríamos otro sismo mayor a 6.5”.
La respuesta “sería probablemente sí y eso nos debería de asustar? no; nos debería de ocupar como siempre, la sismicidad tampoco tiene que ver con la política…” agregó durante su exposición en el primer encuentro internacional de periodismo en gestión integral de riesgos de desastres en el Instituto de Geofísica de la UNAM.
Señaló, que es necesario mejorar la comunicación entre lo que se conoce sobre microsismos y que riesgos representan.
Recordó que México es un país sismicamente activo donde se registran sismos grandes y pequeños; se acuñó el nombre de micro sismos a movimientos telúricos de baja magnitud.
Estos se presentan donde hay fallas geológicas en todo el territorio nacional incluyendo la Ciudad de México.
Estas fallas ya estaban presentes en el territorio, “desde antes que llegáramos nosotros y ya se producían sismos”, apuntó.
Anteriormente, no se detectaban debido a su baja magnitud, el sistema Sismologico Nacional los ha registrado y cuantificado, se tienen registro de estos que datan de hace 50 o 60 años.
“Lo que tenemos que conocer es que es normal que tiemble; las causas pueden ser las fallas geológicas, los cambios que se tienen en los acuíferos y la influencia de sismos lejanos; eso hay que comunicárselo a la gente”.
Agregó que “lo que no debe ser normal es que nos afecten, hay construcciones muy viejas y habría que reforzarlas y mejorarlas y habría que hacer más simulacros”.