En Chihuahua se vive en estos días una de esas situaciones, la cual ha generado polémica y rechazo de la comunidad artística y de la sociedad en general, pues afecta a una de las instituciones más emblemáticas de la capital del estado, el Centro de Estudios Musicales (CEM), fundado en 1983 por el maestro Modesto Gaytán Márquez, pionero de la enseñanza musical infantil en todo el país.
La Secretaría de Educación y Deporte del Estado de Chihuahua, ha decidido lanzar el programa “Juntos hacemos música”, sustituyendo al que en administraciones pasadas se denominaba “Música en mi escuela”, y que desde hace 8 años había tomado como base de su estructura al CEM, lo cual era viable por ser ambos del ámbito estatal y además favorecía al programa, pues el sistema implementado por Modesto Gaytán y el equipo de maestros que bajo su dirección trabajan con los niños y jóvenes, han demostrado los mejores resultados por 40 años, conformando diversas orquestas (infantil, juvenil, femenil y banda sinfónica), con decenas de alumnos seleccionados por la OSIM (Orquesta Sinfónica Infantil de México) y con un importante porcentaje de exalumnos que han desarrollado carrera profesional en la música.
Sin embargo, el nuevo programa “Juntos hacemos música”, parece tener otras intenciones, pues sin ningún argumento notificaron la destitución del director, Modesto Gaytán, y aún más, la prohibición de que dirija las orquestas que ha formado. Por supuesto que esto ha generado rechazo de los padres y maestros del CEM, pues ni siquiera se les informa a quién pretenden imponer como director, solo se sabe que es ajeno a la institución.
Ese tipo de acciones han sido recurrentes en nuestra historia, un caso muy similar vivió hace casi 50 años la Escuela Nacional de Danza (END), dirigida por la célebre bailarina y escritora Nellie Campobello. Durante el periodo del presidente Luis Echeverría, se proyectó implementar un nuevo sistema de enseñanza de la danza, para lo cual tomarían como sede principal a la END, en la que decidieron posicionar como directora a Silvia Rodríguez, degradando a Nellie, fundadora de la escuela y su directora por 40 años, como “asesora de danza”.
La Escuela Nacional de Danza había funcionado durante todos esos años gracias al liderazgo de Nellie, a un equipo muy comprometido de maestros y a la colaboración permanente de los padres de familia –situación muy parecida a la del Centro de Estudios Musicales–, por lo que la escuela se organizó de inmediato para evitar la imposición y se enfrentaron al Instituto de Bellas Artes, resistiendo durante meses. Nellie envió a los periódicos un telegrama dirigido al nuevo presidente de la República, José López Portillo en el que señalaba:
“…es doloroso que las brigadas de choque de Bellas Artes fueron enviadas para amenazarnos (…) Han paralizado las clases, han desplazado a los maestros y a otros quieren enviarlos a lugares desconocidos (…) es un hecho que a la Escuela Nacional de Danza nunca le han dado gastos menores ni el mantenimiento que la ley ordena, y que los nombramientos de base que tenemos son dieciocho desde el mes de junio de 1932. Toda la Escuela espera ser oída por usted”.
La prensa difundió las actividades de protesta; los maestros, padres y familiares de los alumnos hacían guardia en la escuela para impedir la toma de posesión de la nueva directora, expresando a los medios su exigencia de que las autoridades no metieran a la Escuela en sus movimientos políticos y los dejaran de lado en los programas que llevaran a cabo, misma petición que ahora los padres y maestros del Centro de Estudios Musicales expresan a la Secretaría de Educación y Deporte.
Tras la resistencia y el “ruido” que generaban los padres en los medios, Bellas Artes cedió y Nellie permaneció en la dirección, aunque las autoridades la dejaron prácticamente en el abandono por muchos años; sin embargo, el arraigo y compromiso de alumnos y maestros mantuvieron a la escuela a flote, resurgiendo con los años y manteniendo sus funciones con gran profesionalismo hasta el día de hoy; mientras que Nellie Campobello ha trascendido como una de las mujeres más sobresalientes de la cultura en México.
Ojalá que los padres y la comunidad artística del estado de Chihuahua y del país, logren sostener al Centro de Estudios Musicales y a su director Modesto Gaytán, para no ser arrastrados por “programas” que en su mayoría solo funcionan durante el gobierno en turno, que en este caso, se trata del mismo que en meses pasados se empeñó en retener los libros de texto a todos los niños y adolescentes del educación básica del estado.