Londres. Los beneficios de BP en el primer trimestre se desplomaron 40 por ciento a dos mil 700 millones de dólares, por debajo de las previsiones, después de que el descenso de los precios de la energía y una interrupción en una refinería estadunidense contrarrestaron el aumento de la producción de petróleo y gas.
La empresa londinense mantuvo su dividendo en 7.27 céntimos por acción y el ritmo de su programa de recompra de acciones en mil 750 millones de dólares durante los próximos tres meses, similar al del trimestre anterior.
El beneficio se situó 5 por ciento por debajo de las previsiones de los analistas, haciendo mella en los esfuerzos del presidente ejecutivo, Murray Auchincloss, por estabilizar la empresa tras un periodo difícil que siguió a la abrupta dimisión de su predecesor Bernard Looney en septiembre.
Auchincloss, que fue responsable de finanzas con Looney, ha prometido simplificar las operaciones de BP y recortar costos ante las dudas de los inversores sobre los planes para reducir la concentración de la empresa en el petróleo y el gas y ampliar un negocio de bajas emisiones de carbono.
BP presentó el martes un objetivo de ahorro de costos en efectivo de al menos dos mil millones de dólares para finas de 2026 en comparación con 2023.
Los resultados reflejaron la bajada de los precios de la energía y el impacto de la interrupción de su refinería de Whiting, Indiana, que se vieron parcialmente compensados por un buen resultado en el comercio de petróleo, mayores márgenes de refino y producción de petróleo y gas.
La producción de crudo y gas aumentó 2.1 por ciento respecto al año anterior hasta 2.38 millones de barriles equivalentes de petróleo al día, gracias a la puesta en marcha de nuevos yacimientos en Azerbaiyán y Estados Unidos.