Ciudad de México. Ante las nuevas versiones sobre el extravío de Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito de la diócesis Chilpancingo-Chilapa la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) pidió “respetuosamente, que se eviten conjeturas y especulaciones que enrarecen el caso de forma innecesaria, tomando en cuenta la dignidad humana” y descartó señalar lo ocurrido como secuestro, sino como “temporal desaparición”.
El comisionado estatal de seguridad de Morelos, José Antonio Ortiz Guarneros, dijo hoy que no existen elementos para considerar que la ausencia del prelado se hubiera debido a un secuestro, pues habría ingresado “voluntariamente” a un hotel, junto a un hombre, el cual se retiró posteriormente.
Ramón Castro, secretario general de la CEM precisó que “apenas tenga las condiciones de salud requeridas, el mismo señor obispo Salvador Rangel rendirá su declaración e informará oportunamente” sobre qué fue lo que realmente ocurrió.
La CEM, expuso que “ante todo damos gracias a Dios porque fue hallado con vida monseñor Salvador Rangel Mendoza (quien tiene 78 años de edad).
“También queremos agradecer la genuina preocupación de diferentes personas, grupos e instituciones, sobre la temporal desaparición y ahora sobre el estado de salud” del purpurado.
Precisó que “como iglesia confiamos en las instituciones y eso nos lleva a dejar en manos de las autoridades la investigación correspondiente”.