Ciudad de México. Nuestra música es de nueva creación, no muy afín a la estética actual, pero es interesante para muchas personas, y eso es lo que nos hace insistir
, afirmó Arturo Caraza Orozco, saxofonista alto de Xalapa Jazz Orchestra, agrupación que nació hace ocho años bajo el formato de big band y con el propósito de ser un taller para los músicos radicados en esa localidad veracruzana que, pertenecientes a diferentes instituciones o agrupaciones, tenían la inquietud de reunirse y explorar algo diferente de lo de sus entornos de trabajo.
En una entrevista con La Jornada, en el contexto del Día Internacional del Jazz que se celebró el 30 de abril, el músico contó que bajo ese concepto comenzaron a reunirse estudiantes y maestros del Centro de Estudios de Jazz de la Universidad Veracruzana, la Orquesta Universitaria de Música Popular (OUMP), la Sinfónica de Xalapa, la Banda Sinfónica del Estado, la Orquesta Municipal de Xalapa y del sexteto Orbis Tertius, para leer e interpretar música.
Durante 2020, las restricciones que impuso la pandemia significaron un reto para la Xalapa Jazz Orchestra, por lo que decidió adaptar su formato de big band a sexteto. Al ser menos integrantes manteníamos la seguridad de la agrupación durante los ensayos, y podíamos movernos mejor
, sostuvo.
Taller de composición y arreglos
En esta época, la agrupación, que en un principio sólo recreaba swing y jazz de los años 20, 30 y 40, comenzó un taller de composición y arreglo que le permitió crear su propia música y después dar vida a su primera producción discográfica: Cronologías (2021).
En este álbum trataron de unificar diferentes ideas musicales desarrolladas con grupos que habían estado en Xalapa. Por ejemplo, hay una pieza de Guillermo Cuevas, fundador de Orbis Tertius, y de Themis Ortega, con arreglos de Valentina Marentes. También hay otras con la participación de Lucio Sánchez, reconocido bajista xalapeño; Jakub Dedina, trombonista de la Orquesta Sinfónica de Xalapa; Alejandro Bustos, saxofonista, Jesús Rodríguez, y del propio Caraza.
Calvario-estación
Destaca la melodía Calvario-estación, secuencia musical que buscó plasmar el trayecto de una de las rutas de autobús más emblemáticas de la capital de la entidad, que atraviesa la ciudad desde la antigua estación ferrocarrilera hasta la iglesia de El Calvario.
En la segunda producción discográfica, Los sueños de Diana (2023), trabajaron el jazz con algunos ritmos mexicanos. El disco toma el nombre de la canción Diana, de Emma Coyolicatzin, que habla sobre una víctima de feminicidio.
“Le pusimos Los sueños de Diana porque cada pieza representa algo que ella pudo haber vivido”, contó Caraza.
La Xalapa Jazz Orchestra ha participado en diferentes encuentros, como el Festival de Jazz de San Luis Potosí Jorge Martínez Zapata, y se ha presentado en Oaxaca, Tabasco, Chiapas, y ciudades como el puerto de Veracruz y Guadalajara. La agrupación ha obtenido varias becas, la más reciente es Proyecto Raíz, que le permitió tocar su repertorio en cuatro estados del país.
Ahora preparan su tercer material, Donde nace el agua, memorias del río Huitzilapan, en el cual buscan musicalizar varias ideas en torno a esta cuenca, que nace en el costado sur del Cofre de Perote y desemboca en el Golfo de México junto al municipio La Antigua.
Intentamos plasmar varias imágenes del río a través de sus paisajes y de su historia. Para lograrlo hicimos una inspección a lo largo del afluente y hablamos con varios arqueólogos y ambientalistas sobre su importancia social y ambiental. Tenemos varias piezas musicales, y ahora trabajamos en aquellas que van a ser parte de nuestra tercera producción.
Retos
Sobre los retos que implica promover el jazz desde el interior del país, Caraza señaló que van desde la falta de foros para promover la música, el acceso a financiamiento y la creación de público, porque nuestra música es de nueva creación... Muchas veces encontramos que nuestros espectadores asocian la música con la fiesta, pero nosotros tratamos de darles diferentes perspectivas, porque no sólo es con ese fin, sino también para la escucha, la reflexión
.
Añadió que la propuesta de Xalapa Jazz Orchestra es mostrar la importancia de la improvisación, así como la complejidad armónica, rítmica y melódica del jazz. También planteó, “muchos de los grupos de jazz están basados en la dirección de una persona, y aquí tratamos de que sea un colectivo.
“Queremos ser un grupo formativo para muchos músicos, mostrar musicalmente lo que vivimos. No damos concesiones a instituciones ni a partidos, mostramos nuestra percepción de la realidad, de nuestro entorno, como la canción Calvario-Estación.”
La agrupación está integrada por Caraza Orozco, saxofonista alto; Alejandro Bustos, saxofón tenor; Salvador Ruiz, trombón; Mariana Flores, contrabajo; Jacobo de Santiago, batería, y Luis Rodríguez, piano. Aunque se mantiene en formato de sexteto, algunas veces suele ampliarse a 14, en presentaciones como ocurrirá en el concierto que ofrecerá el 10 de mayo en la cervecería La Brújula, ubicada en el camino Xalapa-Coatepec, donde el espacio permite tener a más músicos en escena.