Washington. La guerra de Gaza provocó grandes protestas ante un lujoso evento de comedia al que asistieron el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, periodistas, políticos y celebridades, aunque los participantes no la mencionaron durante el acto. En lugar de eso, Biden aprovechó la cena anual de corresponsales de la Casa Blanca para hacer bromas y sombrías advertencias sobre los esfuerzos de su rival republicano, Donald Trump, de recuperar la presidencia del país.
Una velada normalmente centrada en los presidentes, periodistas y comediantes que bromean sobre escándalos políticos y los demás asistentes parecía ilustrar este año las dificultades de dejar a un lado las próximas elecciones presidenciales y los problemas en Oriente Medio y otros lugares.
Biden comenzó su monólogo con una referencia directa pero cómica a Trump, al que llamó “Dormilón Don”, emulando un apodo que Trump ha empleado para el presidente.
Pese a tener una edad similar, dijo Biden, los dos aspirantes a la presidencia tienen poco más en común. “Mi vicepresidenta sí me apoya”, dijo Biden. El exvicepresidente de Trump, Mike Pence, se ha negado a respaldar su campaña.
Sin embargo, el presidente ofreció a continuación un sombrío discurso sobre lo que cree está en juego en estos comicios, y dijo que otro gobierno de Trump sería aún más dañino para Estados Unidos que su primer mandato.
"Debemos tomarnos esto en serio —hace ocho años le habríamos quitado importancia como ‘palabrería de Trump’— pero no después del 6 de enero", dijo Biden al público, en alusión a los partidarios de Trump que asaltaron el Capitolio después de que Biden derrotó al líder republicano en los comicios de 2020.