Madrid. El plan de la derecha española para “matar políticamente” al presidente del gobierno Pedro Sánchez inició hace 10 años, en 2014, cuando estaba al frente del Ejecutivo Mariano Rajoy y tenía como secretario de Estado de seguridad a Francisco Martínez, señalado por varias investigaciones judiciales como el jefe de la “policía patriótica”. Martínez y el polémico ex comisario de policía José Manuel Villarejo, encarcelado durante varios años y procesado por varias causas de espionaje político y empresarial, habrían urdido un plan para vincular al suegro de Sánchez y padre de su esposa, Begoña Gómez, con unos negocios de prostitución encubiertas a través de los saunas que regentaba su familia.
Los diarios La Vanguardia, El País y Eldiario.es rescataron unos audios que vieron la luz por primera vez en el año 2022, por el diario ABC, cuando el ex comisario Villarejo estaba siendo procesado por varias causas penales, entre ellas la del espionaje a separatistas catalanes a través de la “policía patriótica” y durante el gobierno de Rajoy. En los audios, aunque tiene un sonido de mala calidad, se escucha a ex secretario Martínez referirse a la “muerte política” de Sánchez a través de su suegro y de los supuestos negocios de prostitución que ampara su familia. De hecho, a lo largo de su carrera política, éste ha sido uno de los bulos propagados por la guerra sucia en redes sociales por la derecha y la extrema derecha, que sostiene que su esposa Begoña Gómez era en realidad la responsable de gestionar unos saunas públicos en los que se ejercía la prostitución masculina y femenina.
En los audios se escucha decir al ex alto cargo del gobierno de Rajoy: “Esto lo revienta. Esto además mataría políticamente a cualquiera. Pero un tío de izquierdas que va con la bandera del rollo este feminista, muy feminista y lo tiene lleno de polacas chupando pollas en una sauna. Hay que saber todo”.
El ex comisario Villarejo a lo largo de su turbia trayectoria como espía ha trabajado para numerosos políticos y empresas; desde la energética Iberdrola y el BBVA hasta el gobierno de Rajoy y algunos jueces y altos cargos socialistas como Baltasar Garzón, la ex fiscal general del Estado Dolores Delgado. Y todas sus conversaciones y encuentros los grababa en secreto, de hecho una buena parte de las investigaciones abiertas contra la Casa Real proceden de grabaciones hechas por Villarejo, quien fue condenado a 24 años de cárcel y sigue inmerso en numerosas causas penales en su contra, casi todas ellas relacionadas con el espionaje, pero también con el enriquecimiento ilícito y el tráfico de influencias.
En la grabación de casi dos horas de conversación entre Villarejo y Martínez se refieren a una “información mortal” para Pedro Sánchez, que estaría relacionada con los citados saunas “gays” de su familia política y que supuestamente también utilizó el propio Villarejo para “tender trampas a delincuentes de distinto tipo, incluidos terroristas”, se supone que de la organización armada ETA, según relata el portal Eldiario.es. Pero el propio Villarejo reconoció años después en una comparecencia en el Congreso de los Diputados, en el marco de una comisión de investigación, que nunca se utilizaron esos “saunas” para atrapar a ningún miembro de ETA.