Ginebra. La Organización Mundial de la Salud (OMS) disparó hoy las alarmas por la escalada del brote mundial de cólera, una enfermedad bacteriana que prospera en entornos con saneamiento inadecuado y falta de agua limpia.
El responsable del equipo de cólera de la OMS Philippe Barboza advirtió que dos factores agravan la situación: la intensificación de los efectos del cambio climático, como sequías e inundaciones, y una falta crítica de financiación para responder eficazmente al tenso escenario en tormo a esa dolencia.
La agencia sanitaria de las Naciones Unidas clasificó el rebrote del cólera como una emergencia de grado tres, su nivel más alto, en enero de 2023, y desde entonces, la situación ha empeorado, afirmó Barboza.
El cólera es una infección diarreica aguda causada por la ingestión de alimentos o agua contaminados con el bacilo Vibrio cholerae que afecta a niños y adultos y puede ser mortal en cuestión de horas, pues tiene un breve periodo de incubación, que fluctúa entre dos horas y cinco días.
Desde principios de 2023 se han notificado 824 mil 479 casos de cólera y cinco mil 900 muertes en 31 países de cinco regiones de la OMS.
Barbosa informó que sólo en marzo de este año se notificaron 25 mil 424 nuevos contagios en 16 naciones, y precisó que las cifras son especialmente alarmantes en las regiones de África y el Mediterráneo oriental.
A principios de esta semana, la OMS precalificó una nueva vacuna oral, la cual puede producirse de forma más eficiente.
Sin embargo, las vacunas por sí solas no resolverán el problema, advirtió Barboza, ya que el agua potable, el saneamiento y la higiene son las únicas soluciones sostenibles y a largo plazo para poner fin a esta emergencia y prevenir otras futuras.