Guadalajara, Jal. A 32 años de las explosiones del 22 de abril en Guadalajara, que mataron a 212 personas, dejaron 69 desaparecidos y con lesiones al menos a mil 800 víctimas según números oficiales, los damnificados siguen su lucha por lograr justicia y pidieron al gobierno federal que Pemex, que fue el culpable del derrame de gasolina en los ductos del sector Reforma, se haga responsable de todas las secuelas y asuma el juicio histórico por su negligencia.
A los actos conmemorativos realizados no acudieron autoridades ni estatales ni municipales, aunque sí la candidata a la presidencia municipal de Guadalajara, Verónica Delgadillo, el candidato a gobernador por Movimiento Ciudadano, Pablo Lemus, y el candidato a alcalde de Guadalajara por Morena, José María Martínez, quienes firmaron una carta para comprometerse a seguir apoyando el fideicomiso que otorga una pensión vitalicia a los damnificados que quedaron con secuelas físicas permanentes por la tragedia.
En el jardín de San Sebastián de Analco, donde se encuentra una escultura para recordar las explosiones porque esa zona fue donde hubo más personas muertas, Lilia Ruiz, una de las sobrevivientes y quien ha encabezado la lucha que logró se abriera un fideicomiso que les otorga pensión a través de la asociación 22 de Abril en Guadalajara, dijo que aunque no invitaron a autoridades estatales o municipales, se trataba de un acto público conmemorativo al que bien podrían haber acudido si lo hubieran deseado.
Ruiz recordó que a lo largo de 32 años han pasado gobiernos de todos los colores, pero el problema de fondo no se ha logrado solucionar y muchos de los damnificados han muerto en ese periodo sin recibir algún tipo de apoyo para ellos o sus familiares.
“En esta última administración que es la que estamos viviendo ahorita, para nosotros, mucha gente podrá decir lo contrario, pero para nosotros ha sido la peor de todas, porque hemos tenido incumplimiento, falta de atención, promesas y compromisos incumplidos, falsedad de declaraciones”, sentenció la líder social.
La actual administración es emanada de Movimiento Ciudadano, con Enrique Alfaro como gobernador y con Pablo Lemus, actual candidato a gobernador, como alcalde de Guadalajara.
Lemus prefirió desviar hacia Pemex el señalamiento directo de Ruiz y dijo que como próximo gobernador exigirá no sólo una disculpa pública a la paraestatal, sino que aporte recursos para apoyo de los damnificados porque “no se ha hecho cargo ni de los gastos médicos, ni de pensiones".
En su cuartel central, bomberos de Guadalajara realizaron un homenaje para recordar los tres rescatistas de la corporación que fallecieron durante las explosiones, mientras monitoreaban en las alcantarillas los reportes ciudadanos de olor a gasolina en el sector Reforma de la ciudad.
El gobierno estatal no envió representante y prefirió emitir un boletín, en el cual detalla que actualmente 49 víctimas de las explosiones reciben “una ayuda mes con mes”, que consiste para 44 de ellas en “más de 22 mil pesos mensuales y se trata de los que quedaron con algún tipo de discapacidad”.
“Otros dos damnificados obtienen casi ocho mil pesos mensuales, otro casi siete mil y todos cuentan con atención médica integral en dependencias del Gobierno de Jalisco. La autoridad estatal indica que el año pasado erogó casi ocho millones de pesos en medicamentos”.