Lima. La presidenta peruana, Dina Bokuarte, planteó hoy dejar de lado lo que llama “la trivialidad y el odio”, referencia tácita al caso de los costosos relojes Rolex por el que es investigada por la fiscalía anticorrupción.
Así interpretaron diversos medios de prensa el discurso de Boluarte en un homenaje a militares, policías y civiles caídos en el conflicto interno (1990 – 2000), en el Cuartel General del Ejército, en el que además proclamó la lucha contra el terrorismo.
“Dejemos de lado la trivialidad y el odio que a nada nos lleva. Lo dije antes y lo ratifico hoy, los peruanos unidos ganamos todos, desunidos perdemos todos”, afirmó.
Agregó que no caerá en “distracciones menores”, calificada como otra alusión al caso Rolex, y dijo que “nuestra concentración mayor es la necesidades del pueblo y ahí estamos firmes, fuertes y dignos”, a tiempo de llamar a la unidad para el progreso y el desarrollo.
Boluarte usó similares argumentos en la norteña ciudad de Trujillo, donde dijo que “los odios no generan desarrollo, los odios no permiten avanzar”, en el acto de entrega de títulos de propiedad de viviendas construidas para damnificados de las fuertes lluvias e inundaciones de los primeros meses de 2024.
La vehemencia del discurso pareció motivada por la protesta contra Boluarte, de pobladores que coreaban lemas de condena a las 50 muertes en acciones en el inicio de su gobierno y eran impedidos de acceder lugar del acto, por una barrera policial.
En el acto castrense, al que solo asistieron invitados y periodistas, estos fueron evitados por la jefa de Estado, que no habla con la prensa desde hace dos semanas, según reporteros presentes porque no quiere recibir preguntas sobre el caso Rolex, que continúa en la agenda de los medios de comunicación.
El semanario Hildebrandt en sus Trece afirmó que Boluarte ordenó la reciente suspensión y el reemplazo del jefe de la unidad policial al servicio de la fiscalía que investiga a Boluarte por el citado caso, coronel Harvey Colchado.
El oficial encabezó a los policías que, al servicio de un fiscal y por orden de un juez, allanaron a fines de marzo pasado la casa de Boluarte, en busca de evidencias.
Colchado fue suspendido por faltas graves relacionadas con la circulación por Internet de la foto de un pastel de cumpleaños pbsequiado por sus compañeros y decorado con un muñeco disfrazado de policía arremetiendo con un ariete contra una puerta.
La orden indica que esa foto fue una falta de respeto a la presidenta, porque evoca el allanamiento a su casa, lo que el oficial niega, indicando que forzar la puerta de esa manera es usual en allanamientos en los casos resistencia a la operación.
Trascendidos de la fiscalía recogidos por la orensa indican que los otros 13 policías que oparticiparon en el allanamiento están siendo también investigados por la Inspectoría de la Policía, cuyos agentes intentaron acceder a la oficina de la unidad anticorrupción.