Alrededor de 4 mil 500 millones de pesos, pertenecientes a 2.2 millones de cuentas inactivas, pasarán del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) al Fondo de Pensiones para el Bienestar, informó Carlos Martínez Velázquez, director del organismo.
El traspaso de estos recursos más los que se encuentran sin movimiento en las administradoras de ahorro para el retiro (Afore) “no significa de ninguna manera que se tomarán recursos de los trabajadores”, enfatizó en una conversación con medios el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio González.
En el marco de la 87 Convención Bancaria, explicó que las fuentes de financiamiento que están establecidas en la iniciativa para crear el Fondo de Pensiones para el Bienestar son ahorros presupuestales, más los “activos inactivos” de los trabajadores y que están bajo administración de las Afore y del mismo Infonavit.
La iniciativa consiste en crear el Fondo de Pensiones para el Bienestar, que servirá para completar hasta 100 por ciento del último salario la tasa de reemplazo de los trabajadores que cotizan desde 1997. Ese fondo semilla también se alimentará de organismos extintos como la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero. El objetivo es que los ahorros de 10 millones de cuentas inactivas propiedad de trabajadores de más de 70 años.
Martínez Velázquez aseguró que, contrario a lo que se ha promovido, los recursos inactivos son un “derecho imprescriptible” de los trabajadores y en el momento que el usuario de una cuenta inactiva decida reclamar su dinero, la institución que los captó debe pagarlos.
Acusó que antes de 2020 las cuentas inactivas se iban al gasto corriente de los institutos. El nuevo diseño que se discute en el Congreso, aseguró, mantiene la garantía de que en el momento que los recursos sean reclamados por los trabajadores se entregarán.