El subgobernador del Banco México (BdeM) Jonathan Heath dijo que es importante tener mucha cautela y paciencia, y no iniciar prematuramente un ciclo de normalización de la tasa de interés de referencia.

El mes pasado, el Banco de México decidió de forma dividida bajar en un cuarto de punto porcentual su tasa de interés referencial, a 11 por ciento, en el primer ajuste desde que inició un ciclo de endurecimiento monetario a mediados de 2021, pero no abrió la puerta a más recortes citando los retos que supone la inflación.

"Todavía estamos viendo una gran cantidad de cuestiones que yo creo que explican esta persistencia de la inflación y, por lo tanto, creo que sí es muy importante tener mucha cautela, tener mucha paciencia y no iniciar prematuramente un ciclo definitivo de normalización de la tasa de la política monetaria", dijo.

El funcionario agregó que si bien la inflación ha mostrado una trayectoria a la baja desde que tocó máximos en el tercer trimestre de 2022 no se ha visto realmente una clara trayectoria descendiente en los últimos cinco meses.

Sobre el reciente primer recorte a la tasa de referencia, Heath confirmó que se continúa con una estrategia de un manejo gradual y que este recorte aislado fue un ajuste fino para mantener la tasa real ex-ante dentro de un rango manejable.

"Tenemos que tener un manejo activo de vez en cuando para hacer este tipo de ajustes finos, para mantener un rango manejable y sí, asegurar que ese rango, esa postura monetaria restrictiva, se mantenga en estos niveles por el tiempo necesario hasta que veamos ya bien resultados mucho más concretos", puntualizó, según una entrevista publicada este miércoles en un podcast de Banorte.

El subgobernador también señaló que si la Reserva Federal de Estados Unidos se retrasa y no empieza a disminuir la tasa hasta septiembre, de alguna forma u otra eso da al BdeM un poquito más de libertad y margen de maniobra para tomar sus decisiones.

Respecto a la actividad económica, el subgobernador dijo que los primeros datos de enero y febrero "no muestran realmente un dinamismo renovado como se había pensado. Sin embargo, algunos indicadores preliminares que tenemos para marzo sí apuntan en ese camino".

"Quizás el primer trimestre de este año no sea tan resiliente o tan bueno como habíamos pensado originalmente. Sin embargo, sí creo que vamos a ver un crecimiento mayor a 0.1 por ciento, que fue el que vimos en el cuarto trimestre de 2023", afirmó.

"Sabemos que el gobierno federal está aplicando una política fiscal expansionista con un gasto muy cargado hacia la primera parte del año (...) Eso quizás está ayudando o alimentando a la persistencia de inflación", añadió.