Madrid. Ante el auge de EH-Bildu, la formación política de la izquierda separatista vasca liderada por Arnaldo Otegi, se abrieron varias causas penales contra el líder independentista, al que vinculaban con una serie de hechos del pasado más remoto de la organización armada vasca ETA. Después de analizar las pruebas y la solvencia de las acusaciones, finalmente la Fiscalía General del Estado decidió archivarlas de forma definitiva.
Otegi, líder de la izquierda abertzale desde hace más de dos décadas y uno de los principales artífices de la pacificación del histórico conflicto vasco, que culminó con la entrega de las armas y la disolución de ETA, también ha sido condenado en varias ocasiones por su supuesta pertenencia a ETA. La última vez que estuvo en la cárcel fue por, según la investigación policial, intentar reconstruir el llamado aparato político de ETA, que había sido ilegalizado unos años antes. Desde su salida de prisión, en marzo del 2016, Otegi se ha convertido en el referente de EH-Bildu, la formación política que aspira a ganar por primera vez en los comicios autonómicos del próximo 21 de abril.
El auge en las encuentras de EH-Bildu coincidió con la apertura de nuevas diligencias judiciales contra Otegi, entre ella la de su supuesta vinculación al asesinato del directivo de la empresa Michelin en en la ciudad Vitoria, Luis María Hergueta Guinea, ocurrido en 1980. Pero después de analizar las pruebas recabadas por la Guardia Civil y de estudiar el informe y la querella, la Fiscalía General del Estado, a través de la teniente fiscal Marta Durántez, decidió archivar definitivamente este proceso, como también ocurrió con otro más en el que se vinculaba a Otegi al secuestro de un empresario en la década de los ochenta del siglo pasado. El escrito de la fiscal para justificar el archivo sostiene que “los hechos objeto de la investigación estarían prescritos, dada la fecha de su comisión”.
Tres separatistas catalanes se van a Suiza
Ante el avance en el proceso que investiga los supuestos “actos terroristas” cometidos por algunos dirigentes y militantes del separatismo catalán durante las movilización del 2019, cuando se dieron a conocer las sentencias de Tribunal Supremo contra los líderes que impulsaron el proceso de secesión fallido del 2017, tres líderes de la plataforma Tsunami Democràtic decidieron trasladarse a vivir a Suiza ante el acoso judicial. Lo que significa que al menos ocho de los doce procesados en esta causa se encuentran fuera del país, entre ellos los últimos en dar este paso, que son el dirigente de la organización separatista Òmnium Cultural, Oleguer Serra, el escritor y empresario Josep Campmajó y el periodista del medio digital La Directa, Jesús Rodríguez. Que se suman a los que en su día también decidieron salir de España ante las actuaciones judiciales en su contra, entre ellos el ex presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, la ex secretaria general de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Marta Rovira, y el diputado Rubén Wagensberg.