El Banco Central de Reserva de Perú redujo este jueves su tasa de interés clave en un cuarto de punto porcentual (0.25 puntos) para ubicarla en 6.0 por ciento, regresando a los recortes tras un impás el mes anterior, mientras la entidad espera que la inflación anual continúe su tendencia a la baja.

Analistas consultados por Reuters esperaban que la autoridad monetaria mantuviera la tasa de interés estable, con este recorte la tasa se sitúa ahora a niveles de julio de 2022.

“Se proyecta que la inflación interanual continúe su tendencia decreciente y que converja gradualmente al centro del rango meta en los próximos meses”, señaló la entidad en un comunicado.

El directorio también remarcó que permanecerá atento a la evolución de los precios y la actividad económica del país andino para “considerar, de ser necesario, modificaciones adicionales en la posición de la política monetaria”.

La economía peruana, uno de los mayores productores de cobre del mundo, habría crecido entre 2 y 3 por ciento en febrero, de acuerdo con el ministro de Economía, después de cerrar 2023 con una contracción de 0.55 por ciento.

La inflación por su parte se desaceleró en marzo, al situarse en 3.05 por ciento anual, desde 3.29 por ciento anterior, pero aún ligeramente por encima del rango objetivo del banco central de entre uno y 3 por ciento.

Entre otros factores que tuvo en cuenta para la decisión, el banco mencionó las buenas expectativas económicas mundiales, pero apuntó a “los riesgos en los precios de combustibles y fletes derivados de los conflictos internacionales”, en medio de la preocupación por una expansión del conflicto en Oriente Medio.

En su reunión anterior, la entidad monetaria había mantenido la tasa en 6.25 por ciento, marcando la primera pausa en sus reducciones en más de medio año.