La vigencia del pensamiento e imagen de Emiliano Zapata proviene de la congruencia en sus convicciones, quien nunca ambicionó poder político ni beneficios económicos, sino que luchó por la tierra de los campesinos. Nunca buscó negociar porque era un hombre incorruptible e incoptable, sostuvo el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres.
Único orador en la ceremonia oficial en ocasión del 105 aniversario, Batres destacó que a pesar de la traición que sufrió en Chinameca por el coronel Jesús Guajardo, el zapatismo siguió vigente de la mano de Rubén Jaramillo, quien luchó por las causas sociales hasta su asesinato en 1962.
Batres destacó que a partir de los 70s cientos de organizaciones populares, campesinas, estudiantiles, se denominaron con el nombre del caudillo del sur; en 1994, surgió el Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Su ideario en materia agraria cobró vigencia durante el gobierno de Lázaro Cárdenas y durante la cuarta transformación, su pensamiento sigue vigente, Zapata vive.
El acto central en Palacio Nacional fue encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador y contó con la presencia del gabinete del gobierno federal.