Toluca, Edomex. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México informó este lunes que el pollo que se vendía en el establecimiento que fue asegurado la semana pasada en Toluca por estar coludido en prácticas de acaparamiento no era apto para consumo humano, pues pruebas periciales comprobaron sustancias tóxicas que pueden desarrollar cáncer.
Este establecimiento ubicado en la avenida Adolfo López Mateos, casi esquina con Torres Chicas, en la colonia Parques Nacionales de la capital mexiquense, fue asegurado por la Fiscalía estatal, luego de que se comprobó que grupos delincuenciales obligaban a comerciantes de pollo al menudeo a adquirir ahí su mercancía, pues de lo contrario, eran sujetos de agresiones.
Además, este establecimiento también está relacionado con otra investigación, pues el pasado 22 de diciembre, cuatro trabajadores del lugar fueron levantados por un comando armado y estuvieron en calidad de desaparecidos por espacio de 68 días, hasta que hace un par de semanas, las personas privadas de su libertad fueron rescatadas con vida en la zona sur el estado.
A través de sus cuentas en redes sociales, la Fiscalía mexiquense informó que tras asegurar esta bodega distribuidora de pollo, se realizaron pruebas periciales a la mercancía ahí almacenada y los resultados arrojaron que en el polo “fue detectada la presencia de poliacrilamida, carboxilo modificado, alto contenido de carboxilo, tartrato de sodio y potasio”, sustancias que, a decir de la Fiscalía, “incrementan el riesgo de desarrollar cáncer, por lo que se establece que los alimentos asegurados no son aptos para el consumo humano”
Este órgano encabezado por el fiscal José Luis Cervantes Martínez informó que se dio vista a las autoridades sanitarias para profundicen en los estudios, mientras que profundizarán las investigaciones con el apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Secretaría Federal de Segurida Ciudadana y la Guardia Nacional.