Washington. La jefa de la diplomacia de Sudáfrica, Naledi Pandor, acusó este martes a Israel de sentar un precedente con su guerra en Gaza para que líderes desafíen al máximo tribunal de la ONU, y nuevamente denunció una campaña de hambruna en el asediado territorio palestino.
Sudáfrica acusó a Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de supuesto genocidio en el conflicto desencadenado por el ataque del grupo islamista Hamas en territorio israelí del 7 de octubre, lo que enfureció a Israel y provocó críticas de Estados Unidos.
La ministra de Relaciones Exteriores sudafricana afirmó durante una visita en Washington que Israel desafió una resolución provisional de enero de la CIJ que le exigía tomar medidas para prevenir actos de genocidio mientras sigue su lucha contra Hamas en la franja de Gaza.
"Las medidas provisionales han sido completamente ignoradas por Israel", denunció Pandor en el Fondo Carnegie para la Paz Internacional, en la capital estadunidense.
"Ahora vemos hambrunas masivas y ante nuestros propios ojos", declaró. "Creo que nosotros, como humanidad, tenemos que mirarnos con horror y consternación y estar realmente preocupados por haber dado ejemplo".
Pandor añadió que las acciones de Israel pueden significar que otras naciones crean que "tienen licencia". "Puedo hacer lo que quiera y nadie me detendrá", expresó.
"La CIJ no ha sido respetada. Y el día que un africano le falte el respeto, espero que no le digamos a ese líder: 'Oye, estás fuera de los límites, porque eres africano, esperamos que obedezcas'", sostuvo.
Sudáfrica volvió a solicitar al tribunal de La Haya que ordene medidas para que Israel detenga la "hambruna generalizada" que provoca su ofensiva en Gaza.
Israel calificó la petición sudafricana como "indignante" y "moralmente repugnante", y destacó sus iniciativas, como las pausas humanitarias en medio de la guerra.
Una evaluación de la seguridad alimentaria respaldada por la ONU determinó que Gaza se enfrenta a una hambruna inminente, y alrededor de 1.1 millones de personas (casi la mitad de la población) padecen hambre "catastrófica".