Monterrey, Nuevo León. A 14 años del asesinato de los estudiantes del Tecnológico de Monterrey, Jorge y Javier, a manos de elementos del ejército, se les rindió un homenaje en presencia de sus familiares, se reiteró que se haga justicia.
Bajo el puente ubicado en el cruce de las avenidas Luis Elizondo y Garza Sada, se restauró el memorial creado en el 2018 en honor a estos dos jóvenes estudiantes, donde a un costado del mismo, está la placa que la Secretaría de Gobernación colocó, para confirmar que no eran criminales.
“Un año más, ya son 14 años y aquí seguimos luchando, ya se dictó una sentencia pero es un camino que todavía falta por recorrer”, señaló Reyna Arredondo, hermana de Javier Francisco Arredondo Verdugo.
El año pasado se dictó una sentencia para algunos de los responsables en este incidente.
Rosa Elvia Mercado Alonso y Joel Medina, padres de Jorge y la comunidad del Tec, estuvieron en el homenaje que inició a las 7:30 horas frente a la placa instalada en honor a los estudiantes.
“Le damos gracias a Dios por esa sentencia de los noventa años que sentenciaron a los militares y seguimos en la lucha”, dijo la madre de Jorge Antonio Mercado Alonso.
Añadió que para ellos puedan sentirse en paz y tener la justicia completa se requiere que las autoridades actúen sobre los delitos administrativos, en los cuales destacan la alteración de los hechos, abuso de autoridad, robo de identidad, exceso de fuerza y de mentiras.
“Esperamos en Dios que la justicia se haga completa. Quedan unos delitos para que salga la justicia, los delitos que le llaman administrativos, pero en una ocasión nos dijeron que eso ya no era importante y yo creo que sí es importante porque si esos delitos no se hubieran cometido, tal vez Jorge y Javier estuvieran entre nosotros”, expresó.
Asimismo, 14 años han transcurrido desde que elementos del Ejército Mexicano asesinaron a los dos estudiantes del Tecnológico de Monterrey.
El 19 de marzo del 2010 fue cuando ocurrieron los hechos, los jóvenes salían de la universidad y los militares abrieron fuego contra el vehículo donde viajaban Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo.
En aquel entonces las autoridades sostuvieron la versión de que los estudiantes pertenecían a una organización criminal e incluso, les colocaron armas y alteraron la escena de los hechos para justificar el ataque.
Familiares y amigos de las víctimas negaron la versión y aseguraron que los jóvenes eran personas tranquilas, respetuosas y amigables, por lo que iniciaron una incansable lucha en búsqueda de justicia por su muerte.
Javier Francisco era originario de Baja California y estudiaba un Doctorado en Ciencias de Ingeniería, mientras que Jorge Antonio, de 23 años, era alumno de la maestría en Sistemas de Manufactura.