Washington. Los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos de cinco ciudades empezarán a usar cámaras corporales cuando interactúen con el público en virtud de una nueva política anunciada este miércoles.
El director interino de la agencia conocida como ICE por sus siglas en inglés, Patrick J. Lechleitner, informó que la agencia tiene mil 600 cámaras corporales que serán proporcionadas a los agentes y funcionarios de Baltimore, Filadelfia, Washington D.C., Buffalo y Detroit.
“Se trata también de un paso importante para seguir fomentando la confianza del público en nuestros dedicados y profesionales agentes”, señaló Lechleitner.
La medida forma parte de las labores emprendidas por el presidente Joe Biden en 2022 para requerir a los agentes federales que interactúan con el público portar las cámaras para aumentar la transparencia y la confianza en la policía.
El ICE está compuesto por dos unidades: los agentes especiales de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI por sus siglas en inglés) que se encargan de los delitos transnacionales, y los funcionarios de la Oficina de Detención y Deportación (ERO por sus siglas en inglés), que arrestan y expulsan a las personas que se determina que no tienen derecho a permanecer en Estados Unidos.
El ICE llevó a cabo un programa piloto de seis meses con agentes de la unidad de HSI en Nueva York, Newark, El Paso y Houston, y otro programa piloto con los funcionarios de ERO en Atlanta, Indianápolis y Salt Lake City, señaló Lechleitner.
El objetivo es eventualmente expandir el uso de cámaras corporales a toda la nación, pero Lechleitner sostuvo que para ampliar el uso de las cámaras más allá de las primeras cinco ciudades se necesitan más fondos del Congreso.
“Ahora mismo, no podemos hacer más que esas ciudades”, comentó.
En enero, la agencia publicó políticas que explicaban bajo qué situación se deben utilizar las cámaras corporales, como cuando se ejecutan órdenes de arresto planeadas o una orden de deportación, o cuando se responde a disturbios violentos en instalaciones del ICE. La agencia especificó que las cámaras no serán utilizadas para grabar a personas que participen en actividades protegidas por la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.