“¡Igualdad!”, “Todas las mujeres, todos los días, todos los derechos”, “Nos queremos vivas, libres y sin miedo”, son algunas de las consignas que las mujeres expresan cada 8 de marzo y los 365 días del año. Hoy, Día Internacional de la Mujer, amplifico su clamor y enfatizo que la garantía plena de sus derechos requiere no solo de voluntad, sino también de dinero.

Al ritmo que vamos, nos tomará 300 años alcanzar la igualdad de género, así lo ha dicho el Secretario General de la ONU, António Guterres. Por ello, este 8 de marzo lo dedicamos a una reflexión global sobre cómo invertir en las mujeres cataliza el desarrollo social, económico y ambiental que impacta en familias, comunidades y naciones enteras.

La necesidad de aumentar la inversión en salud, seguridad, educación y oportunidades económicas para las mujeres es un imperativo para la igualdad de género y una piedra angular de la Agenda 2030 para construir sociedades resilientes y prósperas, capaces de enfrentar los desafíos y las crisis actuales.

Uno de los principales obstáculos para lograrlo es la alarmante falta de financiamiento, con un abrumador déficit anual de 360 mil millones de dólares en las medidas destinadas a alcanzar este objetivo a nivel global. Además, solo el 0.2% de la ayuda oficial para el desarrollo mundial está destinada a la prevención de la violencia contra mujeres y niñas.

Es urgente que financiemos los derechos de las mujeres para acelerar la igualdad. Aquí algunas ideas de cómo hacerlo y de cómo trabajamos desde la ONU en México para ello:

Defender y promover la igualdad de género. En México, trabajamos con gobiernos, academia, sociedad civil, organismos internacionales, sector privado y medios de comunicación en una amplia agenda por el empoderamiento económico de las mujeres; los derechos sexuales y reproductivos; la aprobación de leyes y presupuestos públicos con perspectiva de género; su acceso pleno a la educación y a carreras de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, y en la implementación de acciones para prevenir y erradicar la violencia feminicida. Un ejemplo de ello fue la Iniciativa Spotlight, programa puesto en marcha con la Unión Europea de 2019 a 2023.

Poner en marcha financiamientos transformadores para la igualdad de género y la erradicación de la pobreza de las mujeres. Según estimaciones recientes, el 75% de los países mantendrán los recortes en el gasto público en 2025 debido a los conflictos y los altos precios en combustibles y alimentos. La austeridad en servicios públicos esenciales, políticas de cuidados y protección social afecta principalmente a las mujeres. En México, el PNUD, en alianza con el Grupo Financiero Banorte, presentó una estrategia para transversalizar la perspectiva de género en los ejercicios de presupuestación participativa de estados y municipios.

Implementar estrategias que fomenten la corresponsabilidad en los cuidados a nivel familiar y social. En coordinación con el Gobierno federal, ONU México impulsa el establecimiento de un Sistema Nacional de Cuidados. En 2023, ONU Mujeres contribuyó a la creación del Mapa de Cuidados de México, el cual le permite a la ciudadanía ubicar servicios para la niñez, personas adultas mayores y con discapacidad. Esto beneficia a las mujeres, en quienes aún recaen la mayoría de las labores de cuidado en el hogar.

Dar visibilidad y amplificar las voces de los movimientos de mujeres, activistas y defensoras de derechos humanos que trabajan en contextos adversos y con escaso apoyo de la cooperación internacional, los fondos multilaterales, los presupuestos nacionales o la filantropía. En 2023, ONU Mujeres se alió con la Secretaría de las Mujeres del Estado de México para fortalecer a organizaciones feministas y de base que promueven acciones de memoria, reparación y justicia social en territorios con altos índices de violencia feminicida.

Por último, no olvidemos impulsar cambios socioculturales que desafíen los roles y estereotipos que perpetúan y amplían las brechas de género en espacios públicos y privados. Apoyemos iniciativas que promuevan la inclusión y el liderazgo de mujeres y niñas en las comunidades, la educación, los deportes, los medios de comunicación, el arte y la cultura, la política, las tecnologías digitales, la consolidación de la paz y la acción climática.

El momento de actuar es ahora. Proteger y promover los derechos de las mujeres garantiza un mundo más justo, próspero y sostenible para todas las personas.

*Coordinador Residente de la ONU en México