Chilpancingo, Gro., Dos estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa Raúl Isidro Burgos murieron anoche al recibir impactos de bala por parte de elementos de la policía estatal de Guerrero en el libramiento a Tixtla, a la salida de Chilpancingo, informaron fuentes policiacas y de la comunidad del plantel.
Los alumnos se dirigían a las instalaciones de la institución educativa –en el municipio de Tixtla, a 14 kilómetros de la capital–, donde se realizan los preparativos para conmemorar el 98 aniversario de su fundación, cuando pasaron por un retén en las inmediaciones de la colonia Indeco.
Los agentes que se encontraban en el puesto de revisión les marcaron el alto, pero los normalistas ignoraron la señal y en respuesta los oficiales abrieron fuego.
Uno de los alumnos cayó muerto en el lugar y otro resultó gravemente herido, el cual falleció cuando recibía atención médica en un hospital. Al cierre de la edición no se había dado a conocer su identidad.
En un comunicado, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal informó que la camioneta en la que se desplazaban los jóvenes –Nissan tipo Frontier NP300, modelo 2020, color blanco– tenía reporte de robo.
Al enterarse de lo sucedido, miembros de la comunidad de la Normal de Ayotzinapa se trasladaron a Chilpancingo, al lugar donde fueron ultimados sus compañeros, y lanzaron petardos contra agentes estatales y municipales.
Un contingente de alumnos se apoderó de una de las patrullas, la trasladaron a la avenida Insurgentes, en el punto conocido como Las Parotas, y ahí le prendieron fuego.
Al cierre de la edición, ni el gobierno de Guerrero, encabezado por Evelyn Salgado, ni el comité de alumnos de la normal había fijado una postura; solamente confirmaron que dos de sus compañeros fallecieron.
Hasta las 23:40 horas no habían llegado al lugar ni la policía ministerial ni los peritos para testificar los daños al vehículo incendiado. Los normalistas anunciaron que hoy se manifestarán para exigir justicia por el crimen de sus compañeros.