Ciudad de México. El motivo por el cual el consorcio estadunidense Citigroup compró al Banco Nacional de México (Banamex), que era tener un banco que ofreciera servicios financieros a empresarios nacionales e internacionales y maximizar las oportunidades de inversión en el país “se ha cumplido”, afirmaron directivos de la institución financiera.
Una vez que concluya la separación entre ambas instituciones en el segundo semestre de este año, como parte del proceso de venta que el grupo financiero norteamericano inició el 11 de enero de 2022, tocará a cada banco aprovechar las oportunidades que ofrece México, como lo es el nearshoring.
“En dos décadas el mundo, la región y nuestro país se han transformado. El motivo del encuentro entre Citi y Banamex se ha cumplido”, dijo Manuel Romo, director general de Citibanamex durante la 32 Reunión Plenaria del banco.
Según Romo, en los últimos meses, Citibanamex ha contribuido con la llegada de 90 empresas americanas y de otros países que buscan aprovechar las oportunidades que ofrece la relocalización.
“Queda siempre mucho trabajo por hacer, sendas nuevas que explorar, lecciones aprendidas que nos deben inspirar a ser mejores como nación, instituciones e individuos”, expresó el director general de Citibanamex, al mismo tiempo de afirmar a los clientes que ambas instituciones continuarán comprometidas con ellos.
Por su parte, Ernesto Torres Cantú, presidente de Citi a nivel internacional, compartió que hay una combinación de factores geopolíticos y económicos que han determinado un cambio “muy significativo” de la economía global y han colocado a México en una lista muy corta de países a observar por su potencial y perspectivas de crecimiento.
Foto cortesía Citibanamex
“Se habla mucho del nearshoring como una tendencia que nos favorece particularmente, pero la mera cercanía geográfica con el mercado más grande del mundo no sería suficiente si no estuviera acompañada de otros factores clave como el grado de integración productiva con los Estados Unidos, la apertura y diversificación de nuestra economía, y la estabilidad macroeconómica y política”, apuntó.
Agregó que “en países que tienen una economía tan abierta como la de México, las tendencias globales son mucho más importantes para determinar el futuro económico. Hay muchos ejemplos, pero uno muy claro es el peso, la economía de Estados Unidos y el manejo macroeconómico prudencial que ha tenido el país”.