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El presidente Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Salinas Pliego protagonizan lo que pareciera ser el capítulo final de una larga pugna por lograr que el empresario pague adeudos fiscales que ha estado litigando desde hace dos décadas. Foto ‘La Jornada’
05 de marzo de 2024 07:36

Lástima: a Ricardo Salinas Pliego ya no le funcionan sus campañas sucias ni los corifeos mediáticos incluidos en su nómina (que se prestan a todo tipo de bajezas) para obtener canonjías y/ o quitarse de encima obligaciones legales, de tal suerte que, por mucho que se retuerza, grite y chantajee, tendrá que pagar los impuestos que adeuda desde hace alrededor de dos décadas, periodo en el cual dos gobiernos panistas y uno priísta le permitieron todo tipo de tropelías–como a otros barones–, pero para su disgusto se topó con pared con la nueva administración.

Son muchas las campañas sucias orquestadas por este impresentable, pero para no ir más lejos, y ante la obligación de pagar alrededor de 25 mil millones de pesos en impuesto no cubierto, meses atrás el de los abonos chiquitos y los intereses de usura lanzó una campaña contra los libros comunistas de texto gratuito, pero no le resultó.

Después puso en acción otra, porque el gobierno me quiere robar un campo de golf en Huatulco, Oaxaca, cuando en realidad llegó a su término la concesión otorgada por administraciones anteriores y la actual decidió no prorrogarla. Tampoco le resultó útil (de hecho, ese terreno ya es área natural protegida).

Sin embargo, como la papa fiscal no se la puede quitar de encima, ahora Salinas Pliego (en entrevista exclusiva con Javier Alatorre, uno de sus corifeos, transmitida en Tv Azteca, una concesión del Estado) denuncia que “nos persigue el SAT con una determinación injusta, de que estas pérdidas fiscales no son válidas. Y luego se voltea y dice: ‘Ah, como tuviste esas pérdidas fiscales y una reforma, me las tienes que devolver y págame dos’”.

El sufrido hombre de negocios denuncia que contra mí actúan como si se tratara de un caso de seguridad nacional, pero nadie investiga los millones de pesos que se roban de las pensiones para los adultos mayores. Si se roba alguien los 400 mil millones de pesos que están repartiendo a los viejitos y que no los repartió correctamente, ¿tú crees que lo persiga? ¿Tú crees que han hecho una auditoría a los 500 mil millones de pesos que reciben los viejitos en pensiones? Nadie revisa si realmente los adultos mayores reciben todo su dinero, además de algunos que murieron y el dinero de esas cuentas siguieron cobrando. ¿Tú crees que ha habido una auditoría de que realmente todas las personas adultos mayores recibieron ese dinero hoy? Todos los que se murieron, que a poco no siguen cobrando multiplicado, es una cantidad de dinero tremenda. Con las nuevas reformas se dará cárcel en automático por evasión fiscal, pero no por disposición indebida de fondos del Estado.

Por lo anterior, el presidente López Obrador invitó a Salinas Pliego a que si sabe que se están robando el dinero, que nos mande la información y yo presento la denuncia, porque parece que habló que del dinero de los adultos mayores se roban 400 mil millones. Que me mande las pruebas y yo presento la denuncia, y lo hago públicamente aquí, nada más que quiero las pruebas.

Lo que el sudoroso señor de los abonos chiquitos no contó fue, primero, que el voluminoso adeudo fiscal viene de tiempos de Vicente Fox, y, segundo, que ha venido litigando desde entonces este asunto, y ha ido creciendo el monto. Y pasa de una instancia a otra, y en algunos casos ya ha habido fallos. Pero de toda la cantidad, lo que fallaron fueron 2 mil 500 millones aproximadamente, y ya lo pagaron, pero falta la mayor parte, que, de acuerdo con el SAT llega con recargos e intereses a cerca de 22 mil, 24 mil millones de pesos, entre 20 mil y 25 mil millones (López Obrador dixit).

Tampoco dijo que por su iniciativa buscó un encuentro con el presidente López Obrador para llegar a un acuerdo. Y se reunieron hace relativamente poco, explicó el mandatario, y éste le dijo: “Vamos a ver cómo se resuelve; le pido al director del SAT y al procurador fiscal que hagan una revisión minuciosa de nuevo para ver hasta cuánto se le podía quitar, de cuánto podía ser la quita, legal porque no se puede hacer una quita ilegal. De todas maneras, la quita era importante: creo que de 8 mil millones, tenía que pagar 14 mil, algo así. Ese era el acuerdo. No el acuerdo, a lo que nosotros llegamos a decir: Bueno, hasta aquí se puede legalmente, con tal de llegar a un acuerdo… y no quiso”, porque lo único que desea es no pagar un centavo. Entonces, ¿a quién le corresponde resolver ahora? Pues al Poder Judicial, por entero”.

Las rebanadas del pastel:

Y como el barón no aceptó, pues el acuerdo no existe; ergo, colorín colorado, hay que pagar.

Twitter: @cafevega

 
 

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