Ixtapaluca, Méx. La Secretaría de Educación mexiquense anunció una investigación al personal de la Escuela Secundaria Oficial No.111 Gabriela Mistral, por la muerte accidental de uno de sus estudiantes. Reconoció, que la dirección del plantel incurrió en actos omisos porque no notificó a la Supervisión Escolar de los hechos suscitados a finales de febrero.

A través de un comunicado, fijo su postura y enumeró los hechos los cuales, por cierto, no coinciden en fecha y número, con la versión que públicamente dio a conocer la madre de la víctima.

Ayer viernes primero de mes, la familia, amigos y padres de familia protestaron en la explanada central de Ixtapaluca, fuera del plantel, ubicado justo frente a palacio municipal.

El 22 de febrero el estudiante de tercer grado Víctor Leonardo Martínez Reyes quien tenía 14 años de edad, sufrió un accidente al golpearse la cabeza mientras practicaba voleibol.

Sharon Reyes Ríos, madre de la víctima, denunció que pasaron al menos tres horas antes de que su hijo recibiera los primeros auxilios y posteriormente fuera intervenido quirúrgicamente por traumatismo en la cabeza.

Narró que al llegar al plantel, su hijo estaba vomitando, desvariaba y lloraba por dolor intenso de cabeza.

La mujer narró lo ocurrido desde el accidente, hasta el día en que su hijo falleció en terapia intensiva de un hospital y por ello exigió la destitución de la profesora Esperanza Santillán Castillo.

Los inconformes, demandaban la destitución de la directora y también del personal docente involucrado en actos de omisión al no brindar atención médica oportuna y cuya pérdida de tiempo, pudo ser crucial para salvar la vida del estudiante.

Ante la falta de respuesta de las autoridades, los inconformes bloquearon ambos sentidos de la carretera federal México-Puebla, a la altura de la cabecera municipal, durante la tarde del viernes.

La mañana de este sábado, la Secretaría de Educación aseguró que de acuerdo con el informe de Supervisión Escolar “la directora en ningún momento informó sobre el accidente y deceso, presentándose incluso de manera normal al Consejo Técnico Escolar sin informar”.

Según la dependencia, tampoco gestionó la intervención del gobierno y asegura fue la Supervisión Escolar quien solicitó apoyo al ayuntamiento local para cubrir los gastos funerarios.

Ante los hechos que derivaron en el deceso del estudiante, dijo se actuará “con trasparencia y de manera justa” desde el punto de vista legal y normativo.

Por tal motivo “se llevará a cabo una investigación exhaustiva del caso para determinar cualquier responsabilidad y tomar las medidas correspondientes”.

Cabe mencionar que en el comunicado de la dependencia, hay datos que no corresponden con la información vertida ayer por la madre; como es la fecha del deceso y el número de paros cardiorrespiratorios que sufrió el menor hasta perder la vida.

Incluso, la información oficial tampoco coincide con el diagnóstico médico del cual dio detalles la progenitora quien, por cierto, también pidió se investigue al hospital privado Polanco, y se deslinde de responsabilidad por posible negligencia médica.