Valencia, España. Bomberos de la ciudad española de Valencia quedaron perplejos el viernes cuando encontraron a un gato vivo acurrucado entre los restos calcinados de un bloque de apartamentos arrasado por un enorme incendio hace ocho días.
Con el nombre de Coco, el felino se reunió con su dueña, Andrea Rubio, que sollozaba tras haber perdido toda esperanza de que su mascota hubiera sobrevivido al incendio, que se cobró la vida de 10 personas y decenas de animales domésticos.
"Coco, cariño, cómo eres tan listo", exclamó Rubio, de 32 años, mientras abrazaba al animal por primera vez tras la catástrofe, según mostraba un video difundido por la policía local en redes sociales.
"Lo hemos encontrado de chiripa en un hueco", se oye decir a un bombero de fondo en el mismo vídeo.
La pareja de Rubio, Javier Fernández, dijo a Reuters que los rescatadores de Coco tropezaron con él en el piso 13, dos pisos por encima de su apartamento en la parte del edificio que sufrió pocos daños. Coco parecía haberse refugiado en el interior del hueco de una boca de incendios.
La pareja llevó inmediatamente a Coco a una clínica veterinaria para que le hicieran un chequeo completo y parecía estar en buen estado de salud, aunque olía mucho a humo, dijo Fernández.
El animal debía permanecer 24 horas en observación para determinar si ha sufrido deshidratación y en qué medida.
El mortífero incendio, que se propagó rápidamente al avivarse las llamas con fuertes vientos, estalló la noche del 22 de febrero en el barrio de El Campanar. Más de 150 supervivientes, entre ellos Rubio y Fernández, viven temporalmente en viviendas sociales vacías a la espera de una solución más permanente.
Esa vivienda será "un nuevo hogar" para Coco, señaló Fernández, apuntando a que aunque al principio el gato pueda sentirse un poco perdido en un espacio que no conoce, pronto se acostumbrará y se sentirá mejor.