Nueva York. Funcionarios de la embajada de Israel en Colombia con pasaporte diplomático ayudaron a mover “alrededor de 150 millones de dólares” del narcotráfico entre Honduras y Bogotá, aseguró el lunes Luis Pérez, testigo de la fiscalía en el juicio al expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, en Nueva York.

También aseguró que entregó 2.4 millones de dólares en 2013 para la campaña del entonces candidato a la presidencia de Honduras.

Exmiembro del cártel de Sinaloa de Joaquín “Chapo” Guzmán, Pérez, quien según algunos medios sería el seudónimo del colombiano Alexander Monroy Murillo, dijo bajo juramento en el tribunal que trataba “con personas que trabajaban en la embajada de Israel en Colombia que tenían pasaporte diplomático”.

Entre “2008 y finales de 2010 si no recuerdo mal” una funcionaria de la embajada israelí ayudó a trasladar desde Honduras a Colombia “alrededor de 150 millones de dólares”, dijo el extraficante que se entregó en 2015 en Belice a agentes de la DEA, agencia antidroga estadounidense.

Por ello pagaban una comisión del “3 por ciento para mover el dinero”, precisó.

Pérez traficó con cocaína desde Sudamérica, principalmente desde Colombia, con destino final a Estados Unidos, vía Venezuela, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Guatemala y México.

El testigo de la fiscalía, que fue condenado en Estados Unidos a algo más de 11 años de cárcel, antes reducir su pena a 6, por lo que ya está libre, dijo que el intermediario de la operación para contribuir a la campaña de Hernández fue un tal “Mario”, “el segundo oficial más importante” de Puerto Cortés, principal puerta de entrada marítima de Honduras.

Fabio Lobo, el hijo del entonces presidente Porfirio Lobo, y el diputado Fredy Renán Nájera (ambos condenados en Estados Unidos por narcotráfico a 24 y 30 años, respectivamente) le presentaron al funcionario del puerto.

Mario “nos escribió un mensaje para pedir ayuda para la campaña electoral y así asegurarse de que iba a mantener su puesto e incluso ser promovido a la máxima autoridad del puerto”, explicó el testigo.

A cambio, les ofreció “la seguridad de que los contenedores con cocaína iban a llegar Ok a Honduras” así como información sobre las operaciones de la DEA en el país centroamericano.

A mediados de 2013 le entregaron, junto con Arnulfo Valle -otro narcotraficante- un millón de dólares y otro más hacia finales de ese año, explicó.

“Mario nos dijo que le había entregado los pagos” a Juan Orlando Hernández para financiar la campaña y este “nos mandó a decir que muchas gracias por el apoyo”.

Unos días antes de la elección, Pérez le dio al jefe de seguridad del candidato a la vicepresidencia otros 400 mil dólares, aseguró.

El testigo de la fiscalía neoyorquina ayudó a lavar más de 500 millones de dólares del cartel de Sinaloa, por lo que recibió el 1 por ciento de comisión, aseguró, aunque también participó en el tráfico de droga de 2008 hasta que se entregó en 2015.

Acusado de crear un narcoestado en Honduras, la fiscalía estadunidense acusa a Hernández de tráfico de cocaína y tráfico y posesión de armas por lo que, de ser hallado culpable, puede ser condenado a cadena perpetua en Estados Unidos.