Bogotá. Con un “enérgico y contundente rechazo” contestó la cancillería de Colombia a las declaraciones del presidente argentino, Javier Milei, según las cuales el presidente Gustavo Petro “está hundiendo a los colombianos y es una plaga letal para los propios colombianos”.
Milei habló para el canal NTN24, vinculado a la cadena RCN de Colombia, de línea editorial ultra derechista, tras asistir en Washington a la reunión anual de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), organizada por la Unión Conservadora Estadounidense.
En este evento, considerado el foro conservador más antiguo de Estados Unidos, Milei compartió tribuna con el ex presidente Donald Trump y con el actual presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien fue recibido con atronadores aplausos. También asistieron la ex primera ministra británica Liz Truss y el dirigente del partido español Vox Santiago Abascal.
Horas después de las declaraciones del jefe de Estado argentino a NTN24, el ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia calificó de “irresponsable” a Milei y dijo que “rechaza estas irrespetuosas declaraciones que se presentan de manera reiterativa y deterioran los lazos históricos de amistad entre las dos naciones”.
Agregó el comunicado de la cancillería colombiana que lo dicho por Milei “representa una ofensa para la dignidad del presidente de Colombia, elegido democráticamente por el pueblo”.
Hace un par de meses, en otra entrevista, el recién elegido presidente de Argentina calificó a Petro de “comunista asesino”, lo cual también generó un fuerte pronunciamiento del gobierno colombiano.
La tensa relación binacional ha provocado el llamado a consultas del embajador de Colombia en Buenos Aires, Camilo Romero, y -según analistas internacionales- tiene en la cuerda floja los vínculos diplomáticos y comerciales entre ambos países.
Tanto Milei como Bukele y Trump cuentan con la simpatía de amplios sectores políticos de Colombia, en especial en lo relacionado al tratamiento de las múltiples expresiones de violencia que conviven en el país, ante las cuales el presidente Petro ha diseñado una estrategia denominada Paz Total cuyos frutos aún no se perciben en la vida cotidiana de regiones rurales y barriadas urbanas históricamente abandonadas por el Estado.