Ciudad de México. Suman 10 años desde el comienzo de operaciones de la planta de ensamblado ubicada en Salamanca, Guanajuato, donde Mazda produce cuatro de los modelos que componen su alineación en el mercado mexicano.
En una celebración que convocó a más de 3 mil personas donde colaboradores internos, concesionarios, proveedores, y otros invitados especiales como funcionarios públicos, se dieron cita para conmemorar la primera década de producción de la planta que genera más de 5 mil empleos directos, más los indirectos derivados de la relación con sus 216 proveedores.
Son Mazda 2 y Mazda 3 en versiones sedán y hatchback, CX-3 y CX-30, los modelos que se fabrican con mano de obra mexicana, destinados para el mercado doméstico y para exportación a 36 países, incluído Japón.
Asunto relevante al considerar que han igualado el nivel de calidad de la casa matriz en su factoría de Hiroshima, Japón, en los procesos de estampado, carrocería, pintura, maquinado, ensamble de motor, ensamble final y embarque.
“Al comenzar la construcción de la Planta teníamos una meta: llevar a nuestros clientes productos de calidad con mano de obra orgullosamente mexicana, a la par de ser fuente generadora de empleos en el país y lo logramos, seguiremos creciendo, … somos una de las plantas de Manufactura de Mazda más importantes a nivel global”, comentó el presidente de Mazda de México, Miguel Barbeyto.
En la historia de la planta, en dos ocasiones han conseguido superar 200 mil unidades producidas anuales, 2023 fue una de ellas con 202 mil, como lo comentó el CEO de Mazda Motor Corporation, Masahiro Moro, quien compartió que en México, de las unidades comercializadas ese año, “el 70% fueron vehículos hechos en esta planta de Guanajuato.
“En Norteamérica, considerado el destino más importante para Mazda, el volumen de ventas fue de alrededor de 500 mil unidades, siendo igualmente el más alto de la historia. Dentro del que, los vehículos producidos en la planta de Salamanca ocuparon un tercio, lo cual demuestra la importancia que tiene esta planta como soporte para el futuro crecimiento en el mercado de Norteamérica”, concluyó el directivo.
Entre los invitados, también estuvieron presentes el presidente y CEO de Mazda Norteamérica, Tom Donnelly, el presidente y CEO de Mazda Canadá, David Klan, y la presidenta y CEO de Mazda Colombia, Ángela López Quintero, así como el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue.
“Agradezco la confianza y apoyo que nuestros socios comerciales siempre nos han brindado. También quiero resaltar que, gracias al esfuerzo de nuestros colaboradores y a su perseverancia para superar desafíos, hemos igualado el nivel de calidad y productividad de nuestra casa matriz en Japón”, dijo el presidente y CEO de Mazda de México Vehicle Operation, Takuji Iwashita.
FInalmente, la marca anunció que, entre los objetivos para el cierre de 2024, tiene en la mira aperturar otros 14 distribuidores, para llegar a 84 de ellos; incrementar sus ventas en el país, de 76 mil en 2023 a 94 mil unidades este año, de las cuales, 64 mil provendrán de manufactura nacional, generando 10 mil empleos directos e indirectos.
Además se recordó a los asistentes que la inversión total de Mazda desde su llegada hace 18 años es equivalente a 1 mil MDD, mientras que ha producido 1 millón 605 mil 28 unidades en los 10 años de la planta de Mazda en Salamanca, Guanajuato.