Sakhir. Christian Horner, jefe de la escudería Red Bull, de Fórmula 1, rompió el silencio de manera mesurada ante las acusaciones que enfrenta por abuso a una empleada. El directivo reconoció que está bajo una investigación por lo que sólo espera se resuelva lo antes posible esta situación.
Al ser cuestionado por qué no se ha apartado como director del equipo y jefe ejecutivo de Red Bull Racing, con la investigación en curso, Horner se defendió. "Como bien saben, hay un proceso en marcha del que formo parte, me temo que no puedo hacer comentarios al respecto", dijo ayer.
"Lo siento mucho, pero no puedo hacer comentarios sobre el proceso o los plazos. A todo el mundo le gustaría una conclusión lo antes posible", señaló.
La investigación contra Horner comenzó hace dos semanas, cuando una empleada de Red Bull "se presentó en diciembre de 2023 en la sede de la empresa de bebidas energéticas en Austria para acusar a al directivo de comportamiento sexualmente transgresor", de acuerdo con el diario neerlandés De Telegraaf.
Horner estuvo presente el miércoles en el comienzo de los entrenamientos de pretemporada de la Fórmula Uno cuando afronta una investigación por parte de la empresa dueña del equipo por presunto comportamiento inapropiado con una empleada.
Fuentes han indicado a The Associated Press que podría haber una resolución antes de la carrera inaugural de la Fórmula 1 del 2 de marzo. El jefe de Mercedes, Toto Wolff, pidió que la investigación de Red Bull fuera transparente, y dijo que la controversia es "un problema para todo el certamen”.
El director ejecutivo de McLaren, Zak Brown, hizo eco de los comentarios de Wolff. "Las acusaciones son extremadamente serias. McLaren se atiene a los más altos estándares de diversidad, igualdad e inclusión. Esto es muy importante para nosotros y nuestros socios”.
En la pista, Red Bull marcó la pauta durante la primera sesión. Max Verstappen fue más de un segundo más rápido que el resto y completó 142 vueltas en el Circuito de Sakhir. El piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez tuvo complicaciones al volante del nuevo RB20, diseñado por Adrian Newey.