La comunidad de Kansas comienza a reponerse tras el tiroteo del miércoles durante la celebración de los Jefes por el título de la NFL después de que 12 lesionados fueron dados de alta, mientras surgen nuevos testimonios para la investigación de la tragedia.
El portal estadunidense TMZ publicó un video que muestra parte del desfile a las 13:48 horas (tiempo de Kansas), momento en el cual habría comenzado el tiroteo que dejó 22 personas heridas y provocó la muerte de Lisa López-Galván, mujer de ascendencia mexicana y quien era madre de dos hijos
En las imágenes se muestra a un grupo de jóvenes que en apariencia discuten con otra persona, quien no es captada por la cámara. En la escena, uno de los adolescentes se molesta y tira una mochila que portaba, mientras otro joven camina hacia ellos y se cubre el rostro.
Poco después de que comenzó el tiroteo, dos de los adolescentes se alejan del lugar, mientras al parecer otro habría recibido un disparo. Sin embargo, no se ve a nadie empuñar un arma ni haciendo detonaciones.
El video aparece un día después de que las autoridades acusaron a dos adolescentes por el tiroteo. La Fiscalía pretende juzgarlos como adultos, pero primero tenían que ser acusados como menores.
La policía detuvo a una tercera persona, un hombre de 36 años de edad y quien enfrenta cargos por posesión ilegal de armas. Amigos y familiares del detenido señalaron que el sospechoso sólo recogió una pistola luego del ataque, por lo cual no tendría relación con éste.
Las autoridades también indicaron que la agresión comenzó por una disputa entre varias personas, por lo cual descartaron que se tratara de un atentado.
Un poco de aliento
La relación entre los aficionados locales y sus equipos deportivos es con frecuencia intensa. Durante el momento de mayor orgullo comunitario, la ciudad de Kansas City –cuya zona metropolitana abar-ca condados en los estados de Missouri y Kansas– experimentó el miércoles uno de los eventos más traumáticos de la cultura estadunidense de este siglo: un tiroteo masivo público.
Ahora, llega un poco de aliento. Al menos 12 de los heridos fueron dados de alta, entre ellos los nueve niños que resultaron afectados, de acuerdo con el diario local The Kansas City Star.
El centro de salud University Health dijo que tres heridos aún recibían atención, mientras uno se encontraba en estado crítico.
Este episodio avivó uno de los debates más delicados en Estados Unidos. El mismo día del ataque, el presidente Joe Biden pidió al Congreso que lo apoye para un mayor control en la portación de armas.
En Estados Unidos, país cuya población es de 332 millones de habitantes, tiene unas 393 millones de armas de fuego en poder de residentes, según una estimación del Philadelphia Research Institute, consignado por el escritor Paul Auster en su libro Un país bañado en sangre (Seix Barral, 2023).
Los integrantes de los Jefes han buscado mostrar empatía con los afectados del ataque en el desfile. El jugador Travis Kelce entregó 100 mil dólares para ayudar a los heridos y siguió a su novia Taylor Swift, quien un día antes donó la misma cantidad a familiares de López-Galván.
Las memorias del tiroteo aún persisten, aunque ahora se busca entre ellos un halo de aliento. En medio del caos, un estudiante del distrito incluso fue consolado por Andy Reid, entrenador de los Jefes, recordó Michelle Hubbard, un funcionario educativo local, para exponer la fortaleza que necesitarán. En los próximos días tendremos que apoyarnos en esa unidad y en los demás
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Con información de Ap