París. Los agricultores franceses comenzaron a bloquear ayer a bordo de tractores varias autopistas en torno a París para denunciar su situación económica, en un pulso cada vez más tenso con el gobierno.
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Al norte y al sur, al este y al oeste, el tránsito quedó perturbado en ocho autopistas alrededor de la capital de la segunda economía de la Unión Europea con tramos cerrados a unas decenas de kilómetros de París, de acuerdo con el sitio de Internet Sytadin.
Los agricultores permanecerán en estas carreteras el tiempo que haga falta
, dijo Luc Smessaert, vicepresidente del sindicato agrario mayoritario FNSEA, mientras los campesinos organizaban campamentos improvisados en la región parisina con fardos de paja, cisternas de agua y aseos portátiles.
Unos mil agricultores con más de 500 tractores participaron en los bloqueos alrededor de París, afirmó una fuente de la policía a la Afp.
En Francia, un poco menos de 10 mil agricultores se movilizaron
ayer, con aproximadamente 5 mil tractores
, añadió la misma fuente.
El sector denuncia caída de ingresos y bajas pensiones
El sector denuncia la caída de los ingresos, las bajas pensiones, la burocracia en los trámites administrativos, la inflación de las normas ambientales y la competencia extranjera, especialmente el acuerdo que negocian la Unión Europea y los países del Mercosur.
La FNSEA y sus aliados de los Jóvenes Agricultores convocaron a un cerco de la capital por una duración ilimitada
para presionar al gobierno, cuando se cumplen 11 días de protestas.
El gremio consideró insuficientes las medidas anunciadas el viernes por el primer ministro, Gabriel Attal, como suprimir el aumento de la tasa del diésel de uso no agrícola y ayudas a sectores en crisis.
Campesinos bloquearon ayer con vehículos pesados una carretera en Argenteuil, al norte de París. Foto Ap
Símbolo de la creciente presión, el presidente Emmanuel Macron se reunió con varios de sus ministros tras permanecer en segundo plano durante las protestas, y la vocera gubernamental, Prisca Thevenot, avanzó que habrá nuevas medidas hoy.
Attal se reunió ayer con la FNSEA y Jóvenes Agricultores y, según la presidencia, Macron abordará el jueves con la titular de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el acuerdo comercial UE-Mercosur, a cuya firma en su forma actual se opone.
El sector agropecuario es culturalmente importante en la séptima economía mundial, aunque su peso en el producto interno bruto retrocedió drásticamente, desde 18.1 por ciento en 1949 en el periodo de reconstrucción posterior a la Segunda Guerra Mundial, a 2.1 por ciento en 2022, señalan datos oficiales.
Las autoridades han evitado frenar las protestas, pero ahora movilizaron 15 mil policías y gendarmes para garantizar el acceso a los aeropuertos parisinos y al importante mercado mayorista de Rungis, a unos siete kilómetros de París, adonde se dirigía ayer un convoy de tractores.
No somos bandidos, sólo queremos respuestas
No somos bandidos. Únicamente queremos respuestas, porque este es nuestro último convoy, nuestra última batalla por los agricultores (...) Es una cuestión de supervivencia
, refirió a Afp Karine Duc, integrante del sindicato Coordinación Rural.
Francia ha perdido en 50 años tres cuartas partes de sus agricultores y ganaderos y recurre cada vez más a las importaciones: un pollo de cada dos viene del extranjero, así como 60 por ciento de frutas.
Aunque los agricultores recibieron muestras de apoyo en los últimos días, las organizaciones no gubernamentales, ecologistas, además del sindicato agrario de la Confederación Campesina temen que se rebajen las normas ambientales, como la utilización de pesticidas, y ponen el foco en una mejor remuneración y en el fin de los tratados de libre comercio.
Más allá de Francia, la ira agraria se ha hecho oír en varios países de la UE como Alemania, Polonia y Rumania. El domingo, trabajadores del campo belgas a bordo de tractores bloquearon una importante autopista demandando reformas en la Política Agrícola Común (PAC) europea.
No es un problema de precios. Se trata de una situación de costes (de producción) que nos están llevando a la ruina
, mencionó Pedro Barato, dirigente del sindicato agrícola Asaja, en la radio española Cope, avanzando así las protestas en España a partir de la próxima semana.