Ciudad de México. Medir qué tanto ha avanzado el futbol femenil, a la par de las grandes potencias, será una de las principales exigencias que la selección enfrentará cuando comience la primera edición de la Copa Oro. Al menos así lo entiende Karla Nieto, una de las futbolistas convocadas al primer microciclo rumbo a esta competición internacional, a disputarse del 20 de febrero al 10 de marzo en Estados Unidos. En un año en el que la selección no estará en los Juegos Olímpicos, el torneo de la Concacaf toma relevancia para comprender dónde se encuentra parado el balompié nacional.
"Al final se trata de ver qué tanto hemos crecido y qué tanto ha avanzado nuestro futbol y si nuestra liga nos ha ayudado a crecer", reveló la jugadora del Pachuca.
La consecución de dos medallas de oro en 2023, en Juegos Centroamericanos y Panamericanos, no es suficiente para una selección en evolución y que en los últimos años se quedó a la deriva de eventos importantes como la Copa Mundial y los olímpicos.
No lo asumen como un ajuste de cuentas, pero sí como la oportunidad de probarle a las demás naciones que el tricolor es capaz de ser protagonista.
"No es una revancha, es demostrar que México puede estar en un Mundial y que podemos competir con las mejores selecciones del planeta", agregó la mediocampista y parte de la delegación que ganó la medalla de oro histórica en Santiago 2023.
El 20 de febrero, el Tricolor abrirá su participación en la Copa Oro ante Argentina. Tres días después enfrentará al ganador del repechaje entre Guyana y República Dominicana y finalmente cerrará la fase de grupos el 26 contra la cuatro veces campeona del mundo, Estados Unidos.